Hace unos días vi una película en televisión que me llamó la atención, se llamaba Apocalipto y fue rodada en el año 2006, su guionista y director era Mel Gibson. Estaba rodada en el idioma de los protagonistas y con subtítulos en español, poco a poco me fue enganchando y la vi entera. La cosa va de un pueblo salvaje que vive en las selvas de México y su vida se desarrolla con paz y tranquilidad hasta que llegan unos guerreros aztecas que matan o se llevan prisioneros a hombres y mujeres para después venderlos a los sacerdotes del templo Maya que les quitan el corazón y les cortan la cabeza que arrojan por las escalinatas del templo. 

Desde hace un par de años, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no para de dar la paliza al Rey y al Gobierno de España pidiéndoles que pidan perdón por las atrocidades que los conquistadores españoles cometieron contra el pueblo azteca. Después de ver Apocalipto yo pienso que tan solo con que sea verdad un 10% de lo que cuenta la película quien tiene que pedir perdón son los aztecas a los pueblos que machacaron.