Sábado 13 de noviembre, un hombre cae al agua en el puerto de Alicante y nadie se hace eco de ello. Corría una tarde plácida por el paseo del puerto, junto al centro comercial Panoramis, un par de personas sin hogar pasan la tarde sentados en un banco y entre sus pocos quehaceres toman alguna bebida para pasar la tarde entre amigos de la manera más amena…pero en un momento dado, uno de ellos se levanta del banco perdiendo el equilibrio y cayendo al agua…su querido amigo pide ayuda despavorido a los transeúntes que por allí pasan y uno de ellos llama al teléfono de emergencias. Pasados los minutos de rigor burocrático, un agente de la Policía Portuaria llega al lugar en apenas un minuto desde el aviso a su central. El agente sale apresurado del vehículo y observa el cuerpo de una persona flotando boca abajo en el agua. Con las mismas se despoja de sus botas y decide lanzarse al agua con la esperanza de poder salvar la vida a una persona, sea cual sea su origen o estatus social. En esos momentos, las esperanzas son pocas, pero en el mismo agua decide bombear el abdomen del accidentado para extraer todo líquido que pudiera haber tragado y comienza seguidamente practicándole un masaje cardíaco. Apenas uno o dos minutos después llega su compañero y entre uno y otro lograrán sacarlo del agua, momento que también llegan del SAMU…Tras más de media hora tratando de devolverlo a la vida, este “OLVIDADO” pasa a mejor vida.

PD: Los agentes y servicios de emergencia siempre velarán por la seguridad y salud de cualquier ser humano, ¿y los medios de comunicación?