Todos somos hijos de Dios

El papa Francisco asegura que "la homosexualidad" no es un delito

El papa Francisco asegura que "la homosexualidad" no es un delito / EP

Moisés Aparici Pastor

Moisés Aparici Pastor

Le conocemos, es el papa Francisco, al que muchos millones de personas veneran, y otros tantos infaman, por miedo a las palabras que imprime en favor de los más débiles y necesitados, e incluso de comprensión hacia las tan denostadas personas homosexuales. Estas personas señaladas sostienen su voluntad resquebrajada, sienten culpa de nada que desahoga en ellas. Su entusiasmo por ser lo que son, no claudica, persisten en su condición, no pueden hacer otra cosa, y viven sus esperanzas, como cualesquiera otras personas, cuajen o no, ahí es donde debemos y podemos ayudarles, incluido el papa, para que sus sueños no se malogren.

No es un delito. Todos somos hijos de Dios. El pontífice califica las leyes que criminalizan al colectivo LGTBI como injustas y considera que la iglesia tiene que trabajar para ponerles fin. Dios ama a todos sus hijos tal y como son. Ser homosexual no es un delito. Reconoce que hay obispos repartidos por el mundo que todavía apoyan leyes que criminalizan la homosexualidad o que discriminan a la comunidad LGTBQ, aunque él mismo tilda la homosexualidad como un pecado. El repasito para los obispos no es poco, También el obispo tiene un proceso de conversión… debían mostrar ternura, por favor, ternura, como la tiene Dios con cada uno de nosotros. Es importante alcanzar el respeto y la normalidad. Palabras de aceptación del papa, que en su comprensión no denigra al colectivo. Muchos países, incluso democráticos, les criminalizan, y debemos defender los derechos humanos y la libertad de las personas por ser lo son. Las normas que discriminan su sexualidad, son injustas y la iglesia católica debe trabajar para ponerles fin. Somos todos hijos de Dios y Dios nos quiere como estamos y con la fuerza que luchamos cada uno por nuestra dignidad