La renuncia de las Cortes a comprar iPhone 6 a los diputados y así evitar el escandaloso desembolso de 64.200 euros ha tenido consecuencias. El Parlamento optó finalmente por adquirir 99 Samsung Galaxy A5 -con un coste de 32.000 euros- , un modelo bastante inferior al anterior, al igual que el precio, 330 euros, IVA incluido, frente a los 650 de los iPhone. Pero el resultado es que muchos parlamentarios ya contaban con terminales personales con muchas más prestaciones. En el país de la picaresca, diputados con dispositivos superiores han recogido los «smartphone» de la Cámara pero, en lugar de utilizarlos ellos, los han cedido a otras personas, familiares, vástagos en su mayoría. Y eso que se han ahorrado, porque éstos han podido disfrutar de móvil con llamadas (hasta 140 euros, aunque no hay límite) con cargo a las Cortes.

La irregularidad ha sido detectada por los servicios del Parlamento que, según pudo saber INFORMACIÓN, han elevado un informe a la Mesa de las Cortes y a la Junta de Portavoces. El asunto se trató con gran discreción en la reunión de ambos órganos hace un par de semanas. El escrito, que firma el jefe del Servicio de Informática de las Cortes, Agustín Ruiz, llega a afirmar que «existen dudas fundadas de que en determinados casos las líneas telefónicas y/o los terminales no son usados por los diputados y las diputadas a los cuales se les entregó». El informe recalca que los «smartphone» se entregan «de forma personal e intransferible para el desarrollo de la labor parlamentaria».

En la reunión a puerta cerrada de los portavoces se certificó que esta práctica se ha producido y, además, que se tenía identificados a los responsables. Incluso se apuntó que el Servicio de Informática se pondría en contacto con los infractores. La situación generó un momento de tensión ante la indignación del presidente del grupo popular, Jorge Bellver. Tanto, que algún portavoz bromeó preguntándole que a ver si era él uno de los responsables. Bellver dejó bien claro que no y que lo que le molestaba era el menosprecio a la imagen de los diputados.

Pero no es ésta la única «vulneración del uso del dispositivo» denunciado por el Servicio de Informática. El responsable de esta área advierte en su informe de que «se ha detectado algún caso en que los teléfonos móviles suministrados por las Cortes han sido "rooteados"». «Esto se hace para instalar programario sin pasar por los portales de aplicaciones oficiales de los fabricantes (Appstore o Google Play)», explica.

«Vulnerable a virus»

Y añade a continuación: «Normalmente se hace para instalar programario de forma ilícita y tiene dos efectos muy negativos: en primer lugar inhabilita la garantía del fabricante, el cual, además, no deja instalar más actualizaciones en el móvil y, en segundo lugar, y lo que es más grave, hace que el terminal sea muy vulnerable frente a virus, troyanos y todo tipo de malware».

El informe concluye advirtiendo de que, por todos estos hechos, se ha «procedido a remitir a todos los diputados y diputadas de las Cortes dos mensajes recordándoles que no pueden desactivarse o alterarse las características de seguridad de los teléfonos móviles y que el uso del teléfono móvil es de uso personal e intransferible».

La renuncia a los iPhone antes del verano supuso un ahorro que, no obstante, se compensó mejorado los ordenadores portátiles convertibles en tabletas que se decidió comprar y que pasó de un presupuesto de unos 1.200 euros a 1.400. Para la compra se convocó un concurso, con un precio de salida de 138.000 euros, que se encuentra en tramitación.