El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que hoy estará en Alicante para una reunión con empresarios, lamentó ayer que «el PP juega a la política de confrontación de territorios» algo que calificó de «una deslealtad total y absoluta y de una gravísima irresponsabilidad». Tras conocer que el Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, garantizó a los barones territoriales del Partido Popular que no habrá quita de deuda autonómica en el nuevo sistema de financiación, el jefe del Consell se mostró «indignado» al tiempo que censuró que se tomen decisiones durante una comida en la sede de un partido político y con una minoría de presidentes autonómicos. Los populares tienen menos gobiernos territoriales que el resto de formaciones juntas.

En declaraciones a este periódico, Ximo Puig recordó que la Comunidad exige «una compensación por la infrafinanciación, es decir, que aquello que otros han cobrado cada año por la financiación ordinaria y nosotros hemos recibido como crédito se compense de una manera justa». «No puede ser que gastando menos que otras comunidades como la del señor Feijóo finalmente acabemos endeudándonos, eso es lo que no es ético», dijo. «No es ético -insistió- la política de confrontación y la política de la desigualdad que está promoviendo el PP», aseveró antes de agregar: «Algunas personas deberían ser más responsables, porque están jugando con fuego en la división entre personas, entre territorios». Según explicó Puig, la actitud de Montoro abriendo la posibilidad a esa compensación fue «una apertura a un diálogo razonable» y a «intentar buscar una fórmula de equidad entre las diversas comunidades». Ahora, añadió, «lo que se está rompiendo, lo que se ha roto, es la igualdad entre españoles y eso es lo que no vamos a permitir».