Durante la inauguración de la última Fiesta de la Cerveza el pasado 25 de octubre en Calp, el alcalde y presidente de la Diputación, César Sánchez, tuvo una «deferencia personal» con el tránsfuga Fernando Sepulcre, que se marchó de Ciudadanos con el sillón de cargo público y que es el báculo que concede al PP la mayoría en el gobierno de la institución provincial. Coincidiendo con el treinta aniversario de la «Oktoberfest» en 2017, la más antigua de las ferias de la cerveza que se celebran fuera de Múnich, César Sánchez le concedió a su socio Sepulcre el honor de pinchar el primer barril de cerveza con el que se inicia el popular evento que se celebra en la Marina Alta. Momento que recoge la imagen con el tránsfuga alicantino ataviado de sombrero tirolés y brindando con el presidente de la Diputación en un mano a mano con jarra de «Paulaner», la tradicional cervesa muniquesa protagonista de la feria organizada por una entidad privada de residentes germanos.

Fernando Sepulcre -concejal tránsfuga en el Ayuntamiento de Alicante donde también puede acabar decidiendo la identidad del próximo alcalde- no tiene ninguna vinculación conocida con el municipio de Calp más allá de su relación política con César Sánchez para aprobar todos los grandes asuntos de la Diputación. Salvo en el último pleno provincial que se alineó con la oposición para reprobar los presupuestos del Estado de Mariano Rajoy en una moción sin impacto en la gestión y puramente declarativa, no le ha fallado nunca al PP. Así que César Sánchez le cedió al tránsfuga ese honor de arrancar una noche en la que la cerveza es la protagonista. Y a continuación, obviamente y tras una noche de fiesta, había que dormir.

Calp está a sólo 50 minutos de coche y 65 kilómetros por autovía de Alicante, ciudad de la que es concejal Fernando Sepulcre. Sin embargo, el tránsfuga se quedó a pernoctar en la localidad de la Marina Alta. No lo pagó de su bolsillo. Fue el consistorio el que se hizo cargo de pagar la estancia en un hotel del municipio ubicado en primera línea de la playa y que se anuncia como un establecimiento con centro de «spa», según la factura que entró en el consistorio que dirige César Sánchez el pasado ocho de febrero como se puede verificar en el detalle del expediente que acompaña esta información. El otro abono, como también recoge el documento tramitado por el gobierno municipal de Calp, corresponde a Javier Sendra, vicepresidente de la Diputación, alcalde de Planes y uno de los hombres fuertes del PP en la comarca de La Montaña. Los dos pagos ascienden a algo más de 160 euros, a 80 euros por barba. Sepulcre percibe en la Diputación unos 70.000 euros -casi 50.000 como salario y otros 20.000 por asistencias- mientras que los emolumentos de un vicepresidente se acercan a los 72.000. Es conocido que el Ayuntamiento de Calp, desde hace tiempo, es uno de los que sufre más dificultades económicas en toda la provincia.

El abono de las dos facturas figura en un expediente fechado el pasado 5 de marzo dentro de un paquete mucho más amplio de casi 27.000 euros con pagos de todo tipo a los que el Interventor Municipal de Calp pone reparos, algo que, sin embargo, no supone un obstáculo para que el concejal de Hacienda presente en el pleno un reconocimiento extrajudicial de créditos que permite, así, saldar esas facturas. El Interventor calpino considera que ese gasto en hoteles del tránsfuga y del vicepresidente Sendra, incluído en el capítulo de atenciones protocolarias y representantivas de los órganos de gobierno, contraviene el principio de anualidad presupuestaria. A pesar de todo, sin embargo, el gobierno municipal del PP propone reconocerlo y saldar esas facturas.