n El descalabro de José Manuel García Margallo en estas primarias ha sido total y absoluto. Apenas 57 votos en la provincia de Alicante -no llegó ni al 1,5% de respaldo en porcentaje- le dejan completamente desautorizado como número uno del PP por Alicante en el Congreso. En plata, al líder del partido en Madrid no le apoya absolutamente nadie entre los militantes de su provincia. De las 57 papeletas que Margalló cosechó en las 58 mesas que se habilitaron en Alicante, casi la mitad salieron de Xàbia, localidad en la que el diputado habitualmente vive y en cuya sede votó al mediodía. En el resto de la provincia cosechó resultados testimoniales como en Alicante -4 votos- o en Elche, Orihuela, Torrevieja y Benidorm, localidades en las que sólo confió en su papeleta un militante inscrito para participar.
Como se recordará, en las últimas elecciones, la dirección provincial del PP ya quería prescindir de Margallo como número uno al Congreso pero, finalmente, su condición de ministro con Rajoy le facilitó volver a ocupar el primer puesto de la candidatura alicantina. En el conjunto de la Comunidad Valenciana, los datos de Margallo, que ha desplegado una importante campaña mediática con presencia en casi todas las televisiones, aún fueron peores. Apenas reunió 125 votos y estuvo a punto de ser superado, incluso, por Elio Cabanes, un desconocido concejal de la Font de la Figuera que logró el respaldo de 119 afiliados de la Comunidad. El rotundo fracaso de Margallo anticipa la renovación de la candidatura alicantina al Congreso para las próximas elecciones generales.
