La eurodiputada de Ciudadanos Carolina Punset se reunió con el expresidente catalán Carles Puigdemont el pasado 9 de octubre. La parlamentaria afincada en la Comunitat Valenciana desveló los detalles de ese encuentro el sábado en una entrevista junto al diputado en las Corts Valencianes Alexis Marí (que es su pareja) en una entrevista a dúo en el programa Preguntes freqüents de TV3.

Punset aseguró que se produjo por un contacto cercano al líder independentista y señaló que la posibilidad de hablar con Puigdemont y conocer «que le llevó a meterse en este lío en un país tan descentralizado» le generó «curiosidad intelectual en un momento histórico».

Asegura que el encuentro duró unos 45 minutos, pero le demostró que ambos están en las antípodas ideológicas. En cambio, Marí, que la acompañó a la cita, aseguró que las ideas de Puigdemont le parecieron «cercanas en muchas cosas».

«Dialogar con Puigdemont no es delito, Albert Rivera debería hacerlo, la democracia es sobre todo sentarse a hablar con los rivales políticos, creo que la solución no es la cárcel ni pegarles palos a los independentistas, lo primero debería ser sentarse con ellos y no criminalizarlos», afirma Punset.

«Tenían acceso a mi correo»

Punset asegura que Ciudadanos (no concretó quien) ha tenido acceso a su correo electrónico en Bruselas desde que se reunió con Puigdemont. La eurodiputada, que el sábado difundió una carta en la que atacaba con dureza a su ya expartido por la política en Cataluña y la deriva ultraliberal e incluso antifeminista, añadió ayer que la vida interna de Cs también deja mucho que desear: «Las primarias no existen, si no eres un palmero no vas en las listas».

También desveló su última conversación con Rivera, que sitúa antes de que hace año y medio hiciera público su malestar con la formación. «Me dijo 'si haces públicas tus discrepancias te irá mal y te lo digo como amigo», asegura.

Expulsión

Mientras, Cs activó el expediente de expulsión precisamente por haber visitado a Puigdemont.

Las fuentes de Ciudadanos aseguran que a Punset se le había abierto un expediente de expulsión después de que visitara a Puigdemont en Waterloo, donde el expresidente tiene ahora fijada su residencia, en un viaje realizado con medios del Parlamento Europeo ya que utilizó un vehículo oficial en el que según dijo ayer el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, iba también Alexis Marí.

Villegas: "Se queda con el sueldo"

El expediente ha sido tramitado por el Comité de Régimen Disciplinario de Ciudadanos, órgano que vela por si algún miembro del partido hace algo considerado indebido dentro de los estatutos.

Ayer, Villegas, explicó en una rueda de prensa en Madrid, según recoge Efe, que Punset ha sido expulsada del partido por intentar «blanquear» la figura de Puigdemont, una actuación totalmente contraria al ideario del partido.

El dirigente de Ciudadanos criticó que Punset no deje el acta de eurodiputada y que «pese a los muchos valores que pregona, al final el valor que defiende es el de seguir cobrando el sueldo».

Incidió en que Ciudadanos ganó el acta en unas elecciones a las que «ni siquiera» se presentó Punset, que heredó de Juan Carlos Girauta el escaño cuando éste se marchó del Parlamento Europeo para ser diputado en el Congreso.

«Ahora, en vez de hacer honor a ese acta y a lo que firmó cuando se presentó con Cs, lo que hace es agarrarse al sillón», lamentó Villegas, que sostiene en que fue lo mismo que hizo su marido cuando se convirtió en «tránsfuga» en las Corts Valencianes.

«Bienvenida a la realidad, señora Punset», ironizó Villegas. «Cuando a uno le pillan haciendo algo tan contrario al ideario de Cs como ir a legitimar al huido Puigdemont (...), se buscan excusas, pero tendrá que mejorarlas porque las que da no son muy convincentes».

Según dirigentes de Ciudadanos, Punset firmó una carta ética cuando llegó al partido en la que se comprometía a dejar el acta si abandonaba el partido.