Movimientos de última hora, a la desesperada, para intentar cambiar nombres de la candidatura municipal en la capital alicantina antes de que el Comité Federal del PSOE, que se reúne este domingo en Madrid, ratifique el listado propuesto por la Ejecutiva local que controla el exsenador Ángel Franco.
El alcaldable socialista en Alicante, Francesc Sanguino, intenta presionar a la cúpula del partido para sentirse más cómodo con el equipo que le acompañará durante la campaña electoral y, sobre todo, con quienes compartirá grupo municipal después de las elecciones municipales del 26 de mayo. Desde Ferraz, en cambio, enfriaron las intenciones del aspirante: no prevén modificar la lista. Tampoco se esperan cambios de última hora en la candidatura municipal socialista en Elche, pese a los intentos del alcalde, Carlos González. A última hora, este domingo, también se resolverá el cabeza de lista del PSOE al Senado por la provincia de Alicante, un puesto en el que parte con ventaja, según la lista validada por el PSPV, el exsenador Ángel Franco frente al "sanchista" José Asensi, que a priori ocupará la tercera posición. El número dos de esa lista sería para Asunción Llorens, presidenta provincial del PSOE en Alicante. Sobre la bocina se conocerá además la solución para la lista municipal en Torrevieja, donde el partido ha emplazado al alcaldable, Andrés Navarro, y al secretario local de los socialistas, Javier Manzanares, a alcanzar un acuerdo.
Por su parte, en Alicante, los movimientos que Sanguino pretende, según fuentes del partido, pasan por sacar de los puestos de salida a dos afines a Ángel Franco, que dejarían el hueco a dos militantes «sanchistas». Ese cambio de piezas que promueve el propio aspirante socialista perseguiría dos objetivos: debilitar al exsenador, que aspira a volver a la Cámara Alta dieciséis años después y que lleva dos décadas controlando la agrupación local del PSOE, y por otro lado integrar en la lista municipal a uno de los sectores perdedores de las primarias, en las que Sanguino se impuso al «sanchista» José Asensi, que logró el 25% de los votos, y a Eva Montesinos (20%), actual portavoz municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Alicante.
Preguntado Sanguino por sus intenciones de modificar la candidatura municipal del PSOE para el 26-M, el alcaldable se limitó a defender la integración de más familias de la agrupación socialista en su proyecto: «Me siento más cómodo en un partido unido».
Sanguino «aterrizó» en el partido, como independiente, a finales de enero, cuando el presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV, Ximo Puig, le eligió a dedo como el «mirlo blanco». Poco después, el ahora alcaldable tuvo que superar el proceso de primarias que convocó por sorpresa Ferraz, para lo que necesitó del respaldo de Puig y también de Franco, cuyo apoyo (en forma primero de avales y después de votos) no fue gratuito.
De hecho, el exsenador colocó a sus piezas en una candidatura que maneja de manera holgada. Según fuentes socialistas, entre los ochos primeros puestos (el PSOE sacó seis concejales en las últimas municipales), Sanguino apenas cuenta con dos apoyos: la «número dos», Trini Amorós, y la «ocho», un puesto que no asegura acta, Llanos Cano. El resto de la lista, si no sufre cambios «in extremis» , son afines a Franco: el actual secretario local del PSOE, Miguel Millana; los hijos de dos históricos socialistas, Lara López y Pedro Boj; la sindicalista Lola Vílchez y Raúl Ruiz. Los diez primeros puestos se completan con Vicente Ronda y Malena Redruello.
Los concejales boicotean al candidato
El alcaldable socialista en Alicante, Francesc Sanguino, hizo campaña este sábado en barrios de la Zona Norte. El independiente, que estuvo acompañado por miembros de su lista, como Miguel Millana o Trini Amorós, no contó con el apoyo de concejales del grupo municipal socialista. Ninguno se dejó ver en el acto con los vecinos, que le reclamaron más presencia policial, más control contra los okupas, más paradas de autobús y mejores zonas deportivas.
