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Objetivos sin cubrir en el cierre de campaña... con una excepción

Con la única salvedad de Vox, ninguno de los partidos con opciones en la Comunidad y en la provincia ha logrado imponer su estrategia durante una carrera electoral corta, insulsa, sin pulso y marcada por Cataluña

Objetivos sin cubrir en el cierre de campaña... con una excepción

A menos de 48 horas de que finalice la campaña electoral más corta, insulsa y, posiblemente, absurda de la historia democrática de España, la incertidumbre por el resultado y la evidencia de que los principales partidos no han logrado imponer ni estrategia ni mensajes tanto en la provincia como en la Comunidad Valenciana se han convertido en los elementos que marcan esta recta final. Con una única salvedad: Vox. Los ultraderechistas no solo han vuelto a protagonizar la movilización más importante de esta cita con las urnas -el acto de Santiago Abascal hoy en València volverá a ser masivo- sino que, además, se han ahormado con comodidad a un espacio ideológico como el debate de Cataluña que les beneficia. Ni un solo día ha faltado el «procés» del menú de esta campaña. Y muchas veces introducido por el PP, como ayer en la Diputación, y Ciudadanos. Al amparo de esas llamas en Barcelona, Vox perfila un espacio que aún puede crecer más en estos últimos días, apuntan expertos demoscópicos, a costa de moderar la subida del PP, que parece frenado en su ascenso; e, incluso, de pescar en bolsas de electores de zonas urbanas y clase trabajadora. Ojo...

Todo apunta a un escenario político muy complejo en el que el avance de Vox va a trazar un «espacio Le Pen» como en Francia que puede tener en Alicante y la Comunidad una de sus plazas fuertes. Pocos dudan, como reconocieron incluso desde la izquierda, que la formación de Santiago Abascal puede acabar siendo, con mucha probabilidad, la tercera fuerza en las elecciones generales del domingo tanto en el ámbito provincial como autonómico. Con un grupo de diputados desde la Comunidad Valenciana que podría llegar a la media docena, dos de ellos de Alicante. Así que Vox ha cubierto sus objetivos. De sobra. Tiene la campaña donde quería y solo le queda rematar el resultado del domingo. Un escenario que apuntalaría su acción de oposición al Consell en instituciones como las Cortes Valencianas en esta segunda versión del Botànic.

¿El resto? Ninguno ha terminado de trazar un relato que le permita afrontar la repetición de estas elecciones generales del próximo domingo con la certeza de que va a cumplir con sus objetivos. Los socialistas tienen una idea clara. Necesitan ser los más votados en la Comunidad y, a la vez, que sumando a sus socios acumulen un escaño más que el bloque de la derecha. Eso permitiría que el primer termómetro del Botànic arrojara una imagen positiva. Un balance de daños controlado para un inicio de legislatura muy convulso. Pero en el alto mando socialistas admiten que ni una cosa ni otra están aseguradas. Ahora no hay «efecto Pedro Sánchez». Repetir los números de abril, cuando las generales se celebraron en compañía de las autonómicas, sería un resultado que aceptarían en el PSPV. Hoy entrará otra vez en escena el presidente del Gobierno. En esta ocasión en Castellón. Ya habrá visitado las tres provincias en dos semanas, señal de lo que se juegan los socialistas valencianos este 10-N.

Tampoco el PP, a pesar de que va a registrar una mejora, sale del todo bien parado de esta campaña. Es cierto que se ha quitado de encima la presión de Ciudadanos que, especialmente en las autonómicas, le disputó el liderazgo del bloque de la derecha. Pero ahora se ha encontrado con la competencia del populismo de Vox, mucho más peligrosa desde el punto de vista electoral. Expertos demoscópicos advierten del riesgo que corre en estos últimos días el PP después de alimentar el conflicto catalán durante estas semanas. Pero, además, el mensaje de Isabel Bonig y de Pablo Casado -hoy también en València a la misma hora que Abascal- de concentrar el voto de derechas tampoco ha terminado de calar. Y en el PP son conscientes de que llegar a una mayoría para gobernar con tres marcas de la derecha en las 52 circunscripciones es prácticamente una quimera. Al menos tienen que dejar claro que son el gran eje alternativo de la derecha, algo que puede quedar en entredicho, también en la Comunidad, si el crecimiento de Vox se dispara. Una lucha entre Casado y Abascal que contrasta con la triste campaña de Ciudadanos, de tono menor y, a estas alturas, con el objetivo casi de supervivencia de frenar una caída -en la Comunidad podría pasar de seis a dos escaños- que podría convertirse en la segunda más acusada de toda la historia.

En el flanco de la izquierda, al margen de los socialistas, Podemos tampoco ha podido lanzar una campaña propia con el relato del bloqueo de Pedro Sánchez, muy tapados por la crisis catalana. Ni tampoco lo ha hecho Compromís, con una agenda valenciana completamente desaparecida y pendientes de una alianza estatal con Íñigo Errejón que alimenta dudas sobre su efecto final en el resultado. Habrá incógnitas... hasta el recuento.

Pedro Duque redobla su actividad para los últimos dos días

Más activo que en los comicios de abril, el candidato socialista al Congreso por Alicante y actual Ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, visitió ayer dos cooperativas agrícolas, Cooperativa Agrícola Villena y Frutos Secos Mañan en El Pinoso. Duque, acompañado por los alcaldes de Villena, Fulgencio Cerdán, y El Pinós, Lázaro Azorín, -en la imagen junto al ministro como número 5 de la lista socialista-, pudo conocer el nivel de rentabilidad de ambas empresas gracias a la innovación tecnológica. El candidato socialista señaló que estas son cooperativas que «tienen un nivel tecnológico equiparable a las mejores del mundo y que son un ejemplo por la investigación aplicada que realizan en colaboración con universidades».

¿Qué tipo de turrón identifica a los principales líderes políticos?

Una firma de Xixona envía al Congreso un pack con el dulce navideño que representa a los candidatos para el 10-N

¿Qué tipo de turrón identifica con cada líder político? Esta pregunta ya tienen respuesta con la iniciativa a través de las redes sociales que ha puesto en marcha una empresa de turronera de Xixona para conocer la opinión de los internautas acerca de la variedad de dulce que representa a los principales políticos. Partiendo de las denominaciones de origen que se producen en Xixona, el turrón blando o Jijona y el turrón duro o Alicante, ya sabemos si pegarle un bocado a Sánchez, Casado, Iglesias o Abascal obliga a emplear la dentadura con más o menos fuerza. Bajo el espíritu de «diálogo alrededor de la mesa» que se impone en Navidad, la firma turronesydulces.com, fundada por Fabián López, ha envido al Congreso un pack personalizado con imagen y nombre del político en el envase. Los turrones «duros» son Santiago Abascal (Vox), Quim Torra (JuntsXCat) y Gabriel Rufián (ERC) mientras que Pedro Sánchez (PSOE), Íñigo Errejón (Más País), Albert Rivera (Cs), Pablo Iglesias (Podemos) y Pablo Casado (PP) son los «turrones blandos».

Toda la información de las elecciones 10N

Descubre con INFORMACIÓN toda la información de los candidatos a las elecciones generales 2019, de los programas de cada partido para esta nueva cita con las urnas y las noticias, curiosidades y aspectos más destacados que se desarrollarán durante esta nueva campaña electoral, así como los que tendrán lugar durante las votaciones del próximo 10 de noviembre. El mismo día de los comicios también podrás acceder de manera rápida, directa y visual a los resultados electorales del 10N en Alicante, Valencia y Castellón.

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