El Partido Popular celebraba el 25 de abril de 2009 un acto multitudinario en la Institución Ferial Alicantina (IFA). Era el arranque de la precampaña para las elecciones europeas, los grandes fastos eran una realidad y una pandemia como la del covid no estaba ni en las peores pesadillas de nadie. Así pues, el PP organizó una cena para 3.000 personas. Eran los tiempos en los que Francisco Camps estaba al frente del Consell y Modesto Crespo presidía la feria alicantina. Un acto que, a la sazón, contó el exsecretario general del PPCV Ricardo Costa, o la exconsellera de Turismo Milagrosa Martínez. Sin embargo, once años después la dichosa factura todavía colea. Hasta el extremo de que IFA ya ha acudido a los juzgados para reclamar al PP el abono de los 8.357 euros que se adeudan desde entonces por la cesión de las instalaciones. Con ello, la Agencia Valenciana Antifraude da por cerrada la investigación que abrió a raíz de la denuncia que presentó la Conselleria de Economía en junio de 2018 por el «simpa» del PP.

La segunda parte de esta historia comenzó en abril de 2018, con el Botànic I ya en el Gobierno. El PSPV pidió en las Cortes a la Conselleria de Economía una copia de todas las facturas emitidas por IFA por los actos celebrados por los populares en la feria entre los años 2003 y 2015. Fue así como salió a la luz un presupuesto de abril de 2009 correspondiente a una cena del PP por importe de 8.359 euros, sin que hubiera rastro de factura ni de ingreso alguno, pese a que las crónicas de aquellos días dejan constancia de que sí se celebró el macroevento, y pese a que el acta del comité de dirección de IFA del 18 de mayo también lo constata. Ante ello, el departamento de Rafa Climent llevó el impago ante la Fiscalía, que acabó archivando el caso. Consideraba que no había conducta dolosa y, por tanto, tampoco ilícito penal. Es más, argumentaba que podía deberse a un error en los procesos internos, achacable, sea como fuere, a la institución ferial. Fue así como la Agencia Valenciana Antifraude siguió con las actuaciones, hasta emitir el informe que ayer se hizo público.

IFA lleva al PP al juzgado por la factura de un acto de 2009

En el documento, de hecho, se deja constancia de las alegaciones que presentó el PP ante los requerimientos de la agencia. En este sentido, lo que argumentaban los servicios jurídicos de los populares es que no tenían constancia de deuda alguna con IFA y que, además, por el tiempo transcurrido, estimaban que ya había prescrito, a lo que sumaba que las cuentas de 2009 ya están cerradas y fiscalizadas.

También significativo es que el PP se escudara en que la Fiscalía ya había investigado el caso y lo había acabado archivando. Ante ello, lo que responde la Agencia Antifraude es que es competente para investigar este caso, ya que su finalidad no es remitir las conclusiones al Ministerio Fiscal, sino que es instar a IFA a que reclame el pago de la factura, respaldando así el inicio del proceso monitorio para pedir los 8.357 euros adeudados, y, más importante aún, determinar si hubo alguna responsabilidad de tipo contable, administrativo o disciplinario por parte de la institución ferial. La situación es tal que incluso en el informe se llega a manifestar que el hecho de no reclamar lo que se le adeuda implica una renuncia a sus recursos, con lo que supone eso de tirón de orejas para el recinto cuyo presidente en aquel momento era Modesto Crespo, que sólo un par de meses después de ese acto que se celebró y no se pagó sería nombrado presidente de la CAM, y que tenía a Antonio Galvañ como director general. Otra cosa es que sí rechaza el argumento de la prescripción en el que se fundamenta el PP, ya que lo que dice es que en las deudas anteriores a octubre de 2015 el plazo es de hasta 15 años.

Ante ello, desde IFA no se quisieron pronunciar ayer respecto a la decisión de la Agencia Antifraude, y se limitaron a señalar que habrá que esperar a lo que diga el juzgado, y la misma posición adoptaron desde el PP, desde donde simple y llanamente se ratificaron en lo que ya habían dicho los servicios jurídicos del partido en las alegaciones presentadas ante este organismo.

Ahora bien, en junio de 2018, cuando salió a la luz que no había rastro ni de la factura ni del pago tanto desde la que era la dirección de IFA en 2009 como desde la cúpula del PP sostuvieron que desconocían quién y cómo se abonaron los gastos que originó la celebración de aquel acto.

No obstante, el informe elaborado por Economía en 2018 con las facturas emitidas por IFA al PP entre 2003 y 2015 sí dejaba constancia de la celebración de otros tres actos que sí se pagaron: dos mítines que se facturaron a Orange Market entre febrero y marzo de 2008 por 19.782 euros y 20.337 euros; y un tercero por la cena de Navidad del PP de 2010, por 15.161 euros inicialmente, pero que se acabaría pagando en mayo de 2014, con una rebaja de unos 2.000 euros.