La Institución Ferial Alicantina (IFA) se convertía el 25 de abril de 2009 en el escenario escogido por el PP para abrir la precampaña para las elecciones europeas. Eran tiempos de grandes fastos, Francisco Camps era el jefe del Consell, Modesto Crespo presidía la institución ferial, y el PP organizaba una cena para 3.000 personas. Sin embargo, nunca se encontró ningún rastro de abono alguno por el uso de las instalaciones. Peor. Ni siquiera se encontró ninguna factura. Sólo un presupuesto. Ahora, once años después del dichoso acto, el PP no sólo ha reconocido formalmente la deuda, sino que ha negociado con el recinto un calendario de pago para abonar los 8.357 euros pendientes, a razón de unos 340 euros mensuales desde el próximo 1 de diciembre y hasta finales del año 2022

Este acuerdo extrajudicial, suscrito entre el presidente del PP en Alicante, Carlos Mazón, y la directora de IFA, Esther Guilabert, llega después de que la entidad acudiera a los tribunales el pasado mes de octubre para reclamar las cantidades pendientes. Lo hacía, además, después de que la Agencia Valenciana Antifraude, con la vía judicial abierta, diera por cerrada la investigación que impulsó a raíz de la denuncia que presentó la Conselleria de Economía en junio de 2018 por el «simpa» del PP. El documento de transacción que se acaba de firmar, sin embargo, no sólo cierra la puerta al procedimiento monitorio presentado por la feria, sino que supone el carpetazo definitivo a este tema que incluso llegó a la Fiscalía, aunque acabó archivándolo. Estimaba, en este sentido, que no había conducta dolosa y, por tanto, tampoco ilícito penal, y se escudaba en el impago que podía deberse a un error en los procesos internos, achacable, sea como fuere, a la institución ferial.

En cualquier caso, desde los servicios jurídicos del PP siempre fundamentaron las alegaciones planteadas ante la Agencia Antifraude en que los populares no tenían constancia de deuda alguna con IFA y que, además, por el tiempo transcurrido, ya había prescrito, a lo que sumaba que las cuentas de 2009 ya estaban cerradas y fiscalizadas, lo que complicaba el abono, según subrayaban en todo momento. El acuerdo extrajudicial recién alcanzado, no obstante, salva esta última cuestión, que era uno de los aspectos a los que más se aferraban desde el partido.

Desde IFA evitaron pronunciarse ayer. Desde el PP, mientras tanto, ponían el acento en que, más allá de los argumentos jurídicos planteados ante Antifraude, nunca habían dicho que no pagarían, y, además, hacían especial hincapié en que desde el partido «siempre se ha creído en IFA y se seguirá apoyando a IFA».