El clima de hostilidad que se vive en el Botànic también se ha trasladado a la provincia de Alicante. El alcalde de Agres, Josep Manuel Francés, de Compromís, ha presentado una cuestión de confianza vinculada a los presupuestos y a la corroboración de su dedicación parcial de 13 horas a la semana por 650 euros al mes, ante las discrepancias que mantiene con su socio de Gobierno, el concejal socialista Rafael Sanjuan.

La imposibilidad de acercar posturas para cerrar las cuentas municipales, prorrogadas desde 2019, ha provocado que el alcalde dé un paso al frente para pedir expresamente el apoyo del PP y también del concejal socialista con el que en estos momentos está gobernando. Lo debatirá hoy en el pleno que ha convocado después de que los presupuestos no hayan podido ser consensuados, por lo que volverá a presentarlos para vincularlos, en esta ocasión, a una cuestión de confianza. Si Josep Manuel Francés no lograra la mayoría suficiente para la aprobación de las cuentas, pasaría a ser alcalde en funciones durante un mes, plazo en el que los grupos pueden presentar una moción de censura con un candidato alternativo. De no ser así, los presupuestos y la retribución del alcalde se aprobarían automáticamente. El alcalde se limitó ayer a asegurar que «no quiero prolongar más una situación que ha llegado al límite. Quiero que el Ayuntamiento funcione. Sé que esto lleva el riesgo de perder la Alcaldía, pero no tengo otra opción», dijo Francés.

Fuentes de Compromís aseguraron a este medio que el alcalde ha tomado esta decisión al no poder gobernar sin presupuestos y sin recibir ningún sueldo. Por su parte, el concejal Rafael Sanjuan indicó que la convocatoria del pleno le pilló por sorpresa y manifestó que «cada uno hace lo que cree que debe hacer».

Fuentes cercanas a la Alcaldía aseguraron que Josep Manuel Francés ha intentado acercar posturas a través de distintas reuniones. Defienden que han presentado esta cuestión de confianza porque el Ayuntamiento está bloqueado y la crispación campa a sus anchas entre los dos socios de Gobierno. A sabiendas de que esta maniobra puede hacerles perder la Alcaldía de Agres, y ante los constantes acercamientos del edil socialista al PP para barajar una posible moción de censura, la coalición ha decidido adelantarse para dejar claro si existe un acuerdo de gobernabilidad. Según lamentan desde el PSPV y Compromís, en estos momentos la situación es insostenible.