Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Botànic se enzarza por À Punt

La formación morada también se desmarca sobre la legislación urbanística

Oltra y Puig, ayer, con la consellera de Sanidad entre ambos. M.A. MONTESINOS

La paz botánica que se había instalado en las Cortes, donde el tripartito llevaba semanas de cierta tranquilidad tras acordar la reforma tributaria o las enmiendas al presupuesto, se rompió ayer en el debate de la ley de medidas fiscales por el rechazo de Unides Podem a apoyar algunos de los cambios que PSPV y Compromís pretenden incluir en la ley de À Punt.

La formación morada no acepta ampliar un año más la moratoria que permite eximir a À Punt de cumplir el límite de un tercio del presupuesto en el coste del personal que impone la ley de creación.

En el grupo socialista se mostraban ayer críticos con la posición morada e incluso les acusaban de tener una actitud más propia de partido en la oposición que de gobierno y creen que su desmarque complica incluso la continuidad de parte de la actual plantilla en el caso de que, cuando el 1 de enero entre en vigor la Ley de Acompañamiento, la cifra tenga que ajustarse al tercio del presupuesto, lo que dejaría en el aire 97 puestos de trabajo.

La enmienda, que aún así queda viva hasta el pleno de presupuestos del 23 de diciembre, acabó rechazada con la abstención de Unides Podem al tener mayoría el bloque de la derecha.

La diputada de Unides Podem Estefanía Blanes defiende que la moratoria no es «suficiente» para dar solución al problema de personal de la corporación y entiende que hay otras fórmulas definitivas que permitirían publicar las ofertas públicas de empleo de forma completa. Blanes cree que hay tiempo y margen para una solución definitiva antes del pleno y llama a sus socios en el Botànic a seguir trabajando para alcanzar una fórmula de consenso.

«No queremos algo provisional sino definitivo. Nuestra propuesta era eliminar esa limitación del tercio en la ley porque pensamos que hay otras fórmulas de control del gasto», señala. Y recuerda que no existe otra empresa pública con esa limitación.

Unides Podem sería más partidario de que se llegara al 40 % del coste del personal, como en la Administración.

Cambios para elegir presidente

El tripartito sí acepta en conjunto cambiar las mayorías para elegir al presidente de la corporación, de forma que sea suficiente con mayoría absoluta en tercera votación. Además, la persona titular de la presidencia del consejo rector podrá tener dedicación exclusiva, que se equipara al sueldo de una secretaría autonómica, o percibir indemnizaciones igual que el resto de los miembros del consejo rector si no tiene dedicación.

Además, el PP anunció que no participará en la comisión de estudio de la nueva ley de À Punt.

Unides Podem también se desmarcó de sus socios ayer en los cambios que se van a introducir en la ley urbanística valenciana, la Lotup, porque entiende que son de un calado excesivo para que se puedan realizar a través de una ley de acompañamiento.

Puig destaca el pacto presupuestario frente a los problemas con Oltra

El president y la líder de Compromís reaparecen juntos tras la reunión para cerrar heridas

Ximo Puig y Mónica Oltra sí que comparecieron ayer juntos ante las cámaras. No para hablar de sus discrepancias, objeto de su encuentro la tarde anterior, sino para un acto con Global Omnium. Oltra logró compromisos para convocar la comisión interdepartamental y formar parte (también Vicent Marzà) del órgano de coordinación de las emergencias (Cecopi), pero iba también con una reclamación para cambiar el modo de elaboración de los presupuestos. Esta quedó apartada.

Puig consideró ayer positiva la reunión con la vicepresidenta del Consell, afirmó que el Gobierno «está para gobernar» e insistió en que lo importante es que la Comunidad Valenciana «ha aprobado por sexto año consecutivo presupuestos en tiempo y forma».

Preguntada, Gabriela Bravo dijo: «Hay que restar trascendencia a algo que ha tenido mucha menos de lo que creo que se ha querido destacar». «Hablar y dialogar siempre es bueno», sentenció.

El tripartito tumba la propuesta clave para que Cs se sume a los presupuestos

Rechaza rebajar el IRPF a las rentas de hasta 50.000 euros pero Cantó aún mantiene la puerta abierta

Los partidos del Botànic, PSPV, Compromís y Unides Podem, tumbaron ayer la propuesta clave para que Ciudadanos se sume a los presupuestos y sobre la que Toni Cantó había puesto la línea roja para sumarse a los presupuestos del Botànic.

Para la formación liberal la bajada de impuestos a las rentas de menos de 50.000 euros era crucial, aunque fuentes cercanas a Cantó señalaron ayer que el canal de comunicación entre los equipos de Cs y del Botànic que están trabajando en los presupuestos sigue abierto y aún confían en llegar a un acuerdo antes de la votación definitiva de las cuentas autonómicas prevista para el próximo 23 de diciembre. El Botànic considera que sería una irresponsabilidad imitar las políticas fiscales de Ayuso porque beneficiaría a los ricos.

Ciudadanos votaría no al tumbarle el Botànic la enmienda y salir adelante la subida de impuestos a rentas altas, pero Cantó dijo esta semana que el no al presupuesto era la opción más alejada.

Mientras, la Ley de Acompañamiento aprobada ayer en comisión recoge las medidas fiscales del Botànic, como la subida de IRPF a tramos de rentas de más de 120.000 euros, o un impuesto a grandes tenedores de viviendas vacías. Además, el Botànic ha aceptado algunas enmiendas presentadas por el PP relativas a la protección de personas LGTBI en delitos de odio, la participación de la Policía Local en cuestiones de violencia de género y ampliación de bonificaciones a barcos electrificados en puertos del Consell.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats