La vicepresidenta del Gobierno valenciano y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha anunciado este lunes la puesta en marcha del proceso de creación de una nueva Ley de Igualdad entre hombres y mujeres en la Comunidad Valenciana, que vendrá a sustituir la de 2003, en base a tres ejes: "redistribución de la riqueza, del poder y de los usos del tiempo".
La futura norma, que prevé estar aprobada esta legislatura, no quiere quedarse en una mera declaración de intenciones sino que busca tener "consecuencias" en la vida real y "sobre todo impacto". En este sentido, se plantea regular que para acceder a subvenciones o a contratación pública, las empresas tengan número un mínimo de mujeres -tendente a la paridad- en los consejos de administración u órganos directivos o que tengan planes de igualdad y conciliación.
También se podría "favorecer" a aquellas empresas que aplican jornadas laborales reducidas de 32 horas semanales o 4 días al semana, que la Conselleria de Economía Sostenible está promocionando. Además, la futura norma quiere fomentar masculinidades igualitarias, la corresponsabilidad y la conciliación.
Así lo ha avanzado Mónica Oltra, en una entrevista en Àpunt y posteriormente en declaraciones a los medios tras reunirse por videoconferencia con representantes Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE), con el objetivo de escuchar sus propuestas en torno a la futura Ley de Igualdad.
Con este encuentro, arranca la fase previa de alegaciones de la futura norma, pero lo hace "sin propuesta previa" porque según ha explicado Oltra, no quieren "condicionar" las diferentes propuestas que puedan hacer las asociaciones de mujeres, los colectivos feministas, entidades o las personas particulares y que tiene a partir de ahora la oportunidad de "decir que esperan de esta ley".
A partir de ahí, se elaborará un borrador y se trabajará sobre él, pero "sin apriorismos y sin dirigir hacia donde han de ir esas propuestas", ha subrayado la titular de Igualdad y Políticas Inclusivas.
La norma quiere abordar las "cuestiones pendientes" en materia de igualdad como son la brecha salarial o "romper techos de cristal pero mirando los suelos de barro, donde muchas mujeres de enganchan, o dicho de otra manera, lo que no puede ser que cuando se rompe un techo de cristal no pensemos en las mujeres que recogen los cristales rotos", ha advertido Oltra.
Además, ha señalado que debe ser una ley que tenga en cuenta la pluralidad de cada caso, puesto que "no es lo mismo ser una mujer blanca de posición económica acomodada y estudios superiores, que ser una mujer migrante, racializada y sin formación. Los problemas no son los mismos y el feminismo tiene que abordar toda la pluralidad de nuestra sociedad", ha reivindicado.
Se trata de buscar donde puede incidir la norma autonómica. Por ejemplo, la administración valenciana no puede regular la prohibición de subcontratación pero sí puede "decir que aquellas empresas que externalizan y subcontratan a camareras de piso que acaban cobrando 2 euros la hora, no puedan acceder a ayudas públicas", ha apuntado.
Es una ley "compleja", ha admitido Oltra, y aunque ha querido ser cauta en cuanto a los plazos, ha apuntado que "estaría bien como objetivo en un año tener anteproyecto aprobado".
Reducir la jornada laboral
Por su parte, el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, ha hecho hincapié en su propuesta de reducción de jornada laboral 32 horas semanales o cuatro días a la semana de la mano de los sindicatos y la patronal, que forma parte de una economía de triple balance: medioambiental ,social y económico.
El programa piloto, ha explicado, pretende un "objetivo ambicioso". Las empresas que voluntariamente decidan incorporarse tendrán que presentar un acuerdo con los representantes sindicales y un proyecto de modernización de sus sistemas productivos.
Por su parte, la administración valenciana ofrecerá formación y una ayuda económica a la empresas que apuesten por esta fórmula a lo largo de 2 o 3 años. De este modo, ha subrayado Nomdedéu, se compromete a pagar el diferencial por la reducción de jornada, esto es el 100% el primer año, un 50% el segundo año y un 25% el tercer año para "acompañar a las empresas hasta que se demuestre en la práctica lo que dice la teoría: que trabajando mejor podemos trabajar menos horas".
Ley trans
Por otra parte, en cuanto a la polémica que está generando la Ley Trans que impulsa el Gobierno central entre algunos colectivos feministas, la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas ha defendido que el movimiento feminista y el movimiento por los derechos LGTBI "siempre han sido aliados".
En su opinión, "no es incompatible, es más son complementarias las regulaciones de derechos de las personas transexuales y de las mujeres". De hecho, "muchas personas trans son mujeres, que han tenido más discriminación, agresiones, sufrimiento y suicidios". Para Oltra, "forma parte del feminismo garantizar derechos de personas trans" y es "todo un complemento".
