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Bonig intensifica su agenda pública en territorio de Mazón

La líder regional popular multiplica sus reuniones y comparecencias en la provincia mientras el presidente de la Diputación suma apoyos para relevarla

Isabel Bonig, Carlos Mazón y Ana Serna, ayer, en Albatera.

Isabel Bonig está tratando de coger oxígeno para enfrentarse a la carrera que supone intentar mantener el liderazgo del PPCV. El respiro que viene dando el coronavirus en las últimas semanas, con un reducido índice de contagios que posibilita una mayor actividad social, ha permitido a la presidenta de los populares de la Comunidad intensificar su agenda pública. Con ello, sus visitas a la provincia se han multiplicado para mantener reuniones con alcaldes, portavoces y grupos municipales, de extremo a extremo de la geografía alicantina. Es precisamente ahí, en Alicante, donde Bonig busca reforzar su perfil para contrarrestar la influencia creciente de Carlos Mazón, ungido por Génova como posible sucesor. Ayer, precisamente, ambos coincidieron en la tournée organizada por Crevillent y Albatera. Ella, como candidata que públicamente se ha postulado. Él, como presidente del PP provincial y de la Diputación; anfitrión al fin y al cabo de la visita de una lideresa a la que podría disputarle el cargo más pronto que tarde.

Con el congreso regional del PPCV a la vuelta de la esquina, pues todo apunta a que se adelantará al mes de julio, Bonig ha pisado el acelerador para ganar visibilidad en el sur de la Comunidad Valenciana. En seis semanas ha recalado en Torrevieja, Ibi, Alcoy y Alicante, además de los dos municipios del Baix Vinalopó y la Vega Baja en los que estuvo ayer. Es una hoja de ruta que, en términos oficiales, busca retomar el contacto frente a frente con representantes institucionales y cargos orgánicos del partido tras meses de distanciamiento social obligado; pero a nadie se le escapa que el partido se encuentra inmerso en un proceso de renovación observado con lupa por Génova, que busca construir la estructura orgánica territorial de la etapa de Pablo Casado.

Desde el entorno de Bonig se presentó ayer el encuentro con Mazón desde la más absoluta normalidad, es decir, como la visita de una presidenta regional que invita su homólogo a nivel provincial a participar en encuentros que tienen como objetivo conocer las necesidades de los municipios. Ayer, Mazón sí acudió a la llamada de la responsable popular. En anteriores convocatorias, por problemas de agenda, según fuentes del PP, no fue posible la foto conjunta.

Lo cierto es que el presidente de la Diputación de Alicante no ha afirmado hasta el momento que se postulará para el cargo regional, pero cada vez son más las voces en el PP que dan por hecho que está llamado a ser el sucesor de Bonig al contar con el respaldo expreso de Pablo Casado y de Teodoro García Egea. En las últimas semanas se han producido importantes movimientos como el de la portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, que habría dejado claro a Génova que estaría dispuesta a apoyar a Mazón. A esto se le une la renuncia de Miguel Barrachina a revalidar la presidencia del PP de Castellón, quien ha sido un apoyo importante para Bonig en su propia provincia. Pese a todo, Bonig parece estar dispuesta a seguir plantando batalla y recorriendo el territorio autonómico para apuntalar posiciones, también en territorio controlado por Mazón.

El PP alienta a los padres a recurrir contra el valenciano

Isabel Bonig alentó ayer a las AMPAS y a las familias a presentar recursos contra la «imposición» del valenciano en las aulas y aseguró que los servicios jurídicos del PP están a su disposición para presentar recursos, primero ante la Conselleria y, si son desestimados, en el TSJCV. «El 28 de febrero, en plena pandemia, Marzà ha exigido a todos los colegios que les mandasen los proyectos lingüísticos donde se establecen los alumnos escolarizados en castellano y que al menos el 25% de las asignaturas troncales sea en valenciano con un claro detrimento de la calidad educativa y del respeto a sus derechos», dijo la presidenta regional popular. A ese respecto, la líder del PPCV consideró que «es un proceso en el que no ha habido participación y se ha engañado a las familias a las que prometieron que no se les exigiría el valenciano».

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