El diputado Joan Baldoví envió la semana pasada una carta a los otros 31 diputados en el Congreso por la Comunidad Valenciana en la que les pedía ir de la mano en la aprobación de una moción para exigir al Gobierno a presentar ya una propuesta de reforma del sistema de financiación de las autonomías. Por ahora, la propuesta no ha encontrado una acogida cálida de la mayoría de grupos. Observan un seguidismo a los ritmos de Compromís y prefieren guardar las distancias. No hay un rechazo contundente, pero tampoco un apoyo decidido.
Unidas Podemos sí ha recogido la moción del valencianista y ha presentado una enmienda para hacerla más aceptable para el Ministerio de Hacienda. Si el texto de Compromís habla de exigir al Gobierno presentar una propuesta de nuevo sistema con recursos suficientes y equitativos, el de la formación morada pide «iniciar de manera urgente, y con la participación de los territorios, el desarrollo de la previsión de las reglas y principios que deben regir el sistema de financiación de las comunidades autónomas».
La intención de Unidas Podemos es realizar un papel de puente entre socialistas (que dirigen el Ministerio de Hacienda) y Compromís, y propiciar un entendimiento, aseguran fuentes de la coalición.
Baldoví señaló al anunciar la iniciativa la semana pasada su disposición a modificar su moción y llegar a una transaccional que pudiera englobar a todos. Pero la propuesta de los morados es considerada como «inaceptable» por Compromís, que considera que se olvida de un montón de elementos, como medidas compensatorias.
Mientras, los socialistas valencianos en el Congreso no ocultan su recelo ante el procedimiento empleado por el único diputado de Compromís. Fuentes del grupo señalan a este diario lo extraordinario de enviar una carta cuando los diputados se comunican verbalmente sin problemas. Ven en ello un interés «mediático» de Baldoví. Se preguntan además por la razón de forzar ahora la máquina cuando la atención está centrada en la pandemia y la recuperación económica. Y defienden el compromiso del ministerio con la reforma de la financiación: como prueba, señalan los avances en el reparto de fondos en el último año y en las inversiones de los Presupuestos del Estado.
En todo caso, apostillan que esperarán a ver las posibilidades cuando la moción figure en el orden del día de un plenario. En teoría, debería ser el próximo, pero caben aplazamientos.
Ciudadanos y PP se mantienen cautelosos. Los diputados valencianos de Inés Arrimadas dicen que estudiarán «minuciosamente la iniciativa» planteada y estarán vigilantes para que «no se conviertan en una moneda de cambio para concesiones nacionalistas y populistas». Su compromiso con la reforma del sistema de financiación está fuera de discusiones, agregan.
Los diputados del PP piden tiempo. Están a expensas de una reunión del grupo para tomar una postura.
