Se ha hecho esperar, pero, finalmente, Ximo Puig y Mónica Oltra se han abrazado públicamente y no han escatimado esfuerzos en demostrar que sus desavenencias son cosa del pasado. El presidente y la vicepresidenta del Consell se reunieron ayer en el Palau de la Generalitat ante consellers, diputados y alcaldes para presentar el Plan Convivint de Infraestructuras de Servicios Sociales que, con una inversión de 561 millones de euros, abordará la reforma y la puesta en marcha de 247 instalaciones y permitirá la creación de 6.600 nuevas plazas públicas en residencias y centros de día para los colectivos más vulnerables, como las personas mayores, con diversidad funcional o salud mental.
Aunque los dirigentes ya han coincidido en otros actos, la presentación de este plan fue su manera de dejar claro ante la opinión pública el fin de su crisis. Al menos por el momento sus desavenencias se han reducido de forma notoria. Puig y Oltra coincidieron ayer en la importancia de sacar adelante un plan para impulsar la construcción de centros públicos y la rehabilitación de instalaciones que en muchos casos llevaban más de 30 años sin ningún tipo de reforma y que ahora se adaptarán a los nuevos modelos de convivencia que incluyen los aprendizajes adquiridos durante el covid y que sitúan, según manifestaron, «a las personas en el centro».
Los buenos datos del coronavirus en la Comunidad han dado un respiro a los socios del Botànic, pese a que desde el inicio de la pandemia este ha sido, precisamente, su principal motivo de enfrentamiento. La vicepresidenta llegó a no acudir al evento donde se presentaron las líneas de la estrategia de la recuperación valenciana y se desmarcó del proyecto al exigir en reiteradas ocasiones un endurecimiento de las medidas. Pero ahora, el índice de casos acumulados en la Comunidad es el más bajo de España, por lo que Puig y Oltra han dejado de manifestar visiones contrapuestas en lo referido a la gestión del covid, aunque también la elaboración del presupuesto erosionó gravemente la imagen de unidad entre ambos.
Fuentes cercanas a los dirigentes explican que la reconciliación se ha visualizado notablemente ante la posibilidad de que Ximo Puig decida adelantar las elecciones autonómicas si Pedro Sánchez termina anunciando una convocatoria anticipada de los comicios generales para aprovechar el impacto del final de la pandemia y la llegada de los fondos europeos. De cualquiera manera, Ximo Puig y Mónica Oltra han zanjado la espiral de tensión que hace tres meses hizo tambalear la estabilidad del Botànic. El presidente agradeció ayer insistentemente la labor de la vicepresidenta y aseguró que, con este plan de Servicios Sociales, «conseguimos que la sociedad sea más humanizada».
El plan Convivint contempla actuaciones en el ámbito de personas mayores, en el ámbito de la diversidad funcional y en centros para personas con problemas de salud mental. El proyecto incluye una apuesta por mejorar la red de centros de atención diurna destinados a la infancia y la adolescencia más vulnerable, con 20 nuevas instalaciones, la mayoría de las cuales se ubicarán en la provincia de Alicante, donde existe una mayor carencia de este tipo de recursos.
La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, explicó ayer que el Plan Revivint incluye reformas y nuevos centros de día y residencias en diferentes puntos de la provincia como Altea, Calp, Dénia, Castalla, Sax, Mutxamel, Xixona, Alicante, Sant Joan, Elche, Crevillent, Orihuela o Rojales.
Este proyecto se ha elaborado a partir del Mapa de Necesidades, a través de una metodología pionera en España y que ha tenido en cuenta tanto indicadores sociales y poblacionales como de vulnerabilidad y edad así como la demanda efectiva de recursos.
Estas variables son las que han guiado el desarrollo de documento, que se ha trazado desde los principios de transparencia y participación, y en el que han participado las diputaciones y los ayuntamientos a través del Órgano de Coordinación y Colaboración Administrativa (OCCI), que ha sido el encargado de consensuar todas las actuaciones.
La cobertura de las necesidades y avanzar hacia la equidad territorial son dos de los objetivos de este proyecto, junto con la finalización de obras pendientes de planes puestos en marcha por anteriores gobiernos, y la lucha contra la despoblación, impulsando la puesta en marcha de servicios de proximidad en el ámbito rural y de interior.
Reformas y nuevas infraestructuras en la provincia
El proyecto llegará a municipios como Dénia, Sax, Xixona, Mutxamel, Alicante, Orihuela o Elche, entre otros
La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, explicó ayer que el Plan Revivint incluye reformas y nuevos centros de día y residencias en diferentes puntos de la provincia como Altea, Calp, Dénia, Castalla, Sax, Mutxamel, Xixona, Alicante, Sant Joan, Elche, Crevillent, Orihuela o Rojales. Este proyecto se ha elaborado a partir del Mapa de Necesidades, a través de una metodología pionera en España y que ha tenido en cuenta tanto indicadores sociales y poblacionales como de vulnerabilidad y edad así como la demanda efectiva de recursos. Estas variables son las que han guiado el desarrollo de documento, que se ha trazado desde los principios de transparencia y participación, y en el que han participado las diputaciones y los ayuntamientos a través del Órgano de Coordinación y Colaboración Administrativa (OCCI), que ha sido el encargado de consensuar todas las actuaciones. La cobertura de las necesidades y avanzar hacia la equidad territorial son dos de los objetivos de este proyecto, junto con la finalización de obras pendientes de planes puestos en marcha por anteriores gobiernos, y la lucha contra la despoblación, impulsando la puesta en marcha de servicios de proximidad en el ámbito rural y de interior.
