La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha presidido este miércoles la constitución del grupo de trabajo para la reforma de los procesos de selección para la Función Pública, que reúne a diez personas expertas en la materia. La titular del departamento cree que el sistema actual está obsoleto y apuesta por implementar pruebas que no estén basadas exclusivamente en la memorización de contenidos. El reto pasa ahora por abordar las claves de esa modernización del sistema de acceso al funcionariado mediante oposiciones.
El grupo estará presidido por el catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de Alcalá de Henares Miguel Sánchez Morón y cuenta con la participación, entre otros, de José María Goerlich Peset y Remedios Roqueta, catedrático y catedrática de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social de la Univesitat de València; Mikel Gorriti, responsable de Recursos Humanos del Gobierno vasco; Virginia Losa, vocal del Consejo General de Secretarios de Administración Local, e Icíar Pérez-Baroja, subdirectora general de relaciones con otras administraciones del Ministerio de Política Territorial.
Entre los objetivos del grupo de trabajo está el diseño del proceso selectivo y del tipo y contenido de las pruebas y programas a utilizar en los procesos selectivos de los diferentes cuerpos y escalas de la Función Pública. También estudiará la configuración de los órganos selectivos para garantizar su especialización y profesionalización de sus integrantes y, por último, analizará los procedimientos para agilizarlos y mejorar su transparencia.
Durante su intervención, la consellera ha explicado que, en la actualidad, el sistema de selección y reclutamiento de personal para la Administración Pública valenciana está "obsoleto". Por ello, además de los procedimientos, se debe "superar el concepto de prueba basada en la memorización de contenidos" porque, este método "no está aportando mejor personal para la Administración".
En opinión de Bravo, la sociedad del siglo XXI exige "una administración nueva" para la que son necesarias "nuevos conocimientos, habilidades y destrezas para afrontar el trabajo".
La consellera ha recordado que los problemas que adolece la Administración "son generales en todos los ámbitos, desde el local al estatal" y que pasan por plantillas envejecidas tras una época "de gran escasez de de ofertas públicas de empleo desde el año 2008".
Para la consellera, aunque es cierto que en los últimos años se ha conseguido convocar más plazas de empleo público "nos encontramos con dificultades con procesos selectivos tan lentos y complejos que no favorecen ni la agilidad ni tampoco la posibilidad de una regeneración de la Administración en un tiempo razonable".
En este sentido, la consellera ha recordado que la nueva Ley de la Función Pública Valenciana "marca un plazo para que ningún proceso selectivo pueda durar más de un año desde el momento de la convocatoria" y que ello "es posible si superamos los procedimientos obsoletos" como los que el grupo de trabajo tiene el encargo de identificar y proponer medidas para su corrección.
