La reunión de la consellera Ana Barceló y su equipo con el comité de empresa del departamento de salud de Torrevieja se celebró ayer en un ambiente tenso con la protesta, a escasos metros, de un centenar de trabajadores y vecinos que reclamaban que la Generalitat desista del proceso de reversión previsto para octubre del área sanitaria que gestiona Ribera Salud desde 2007. Esa fue la banda sonora.
Un portavoz de la Generalitat aseguró que se había avisado a los responsables del hospital en la tarde del miércoles de que se mantendría la reunión a primera hora del jueves con el comité de empresa. La convocatoria a los medios de comunicación se confirmó solo una hora antes de la reunión, un día festivo. Pero los inconvenientes empezaron pronto para los representantes de conselleria. Según Sanidad, cuando acudieron el centro hospitalario no pudieron acceder al salón de actos. «Las llaves de las instalaciones se habían perdido». ¿Dónde estaban las llaves? Plan B: se decide reorganizar la reunión en el Auditorio Internacional. La versión que ofrecen los protagonistas de la protesta y el propio Ayuntamiento, que defiende la continuidad de la empresa al frente de la gestión sanitaria, es distinta. Aseguran que la comitiva del Consell, en la que, además, de la consellera se encontraba el nuevo comisionado, José Pérez, se encontró a su llegada al hospital con la bienvenida de trabajadores en contra de la reversión y, para evitar «territorio hostil», optaron por cambiar de ubicación el encuentro e ir al Auditorio, edificio que gestiona la Generalitat, para el que se forzó la apertura de puertas. Pero sin poder evitar que la protesta se trasladara también.
Prisas, pancartas recogidas, siete kilómetros en coche... Y todos al Auditorio. En el gran vestíbulo de este espacio cultural se volvió a empezar: consignas contra conselleria y la reversión, pancartas desplegadas, pitos, algún manifestante exaltado...Era el segundo acto. La Generalitat no logró dar esquinazo a la ruidosa concentración formada por seguidores de la Plataforma Sanidad Excelente, que reclama la continuidad en la concesión; personal del departamento; cargos directivos de la concesionaria como la directora de Enfermería, el director médico o el responsable de la Asesoría Jurídica, además de representantes políticos, como la edil de Sanidad de Torrevieja, Diana Box.
«Lo que funciona no se toca», «No a la reversión», o « Indulto para la concesión» fueron algunos lemas que, a duras penas, dejaban a los miembros del comité de empresa y a los representantes de Sanidad mantener la reunión improvisada en un espacio que normalmente se utiliza como cafetería-restaurante. Sin presencia policial, la protesta pudo acercarse a la propia reunión. Cuando Barceló decidió dar el paso y comparecer ante los medios de comunicación, el exdiputado nacional y secretario local del PP de Torrevieja, Joaquín Albaladejo, con muchas tablas ya en estas performances desde que comenzaron las reivindicaciones hace más de un año, abordó a Barceló e intentó reprocharle que estuviera esquivando la protesta. La consellera hubo de regresar al interior del edificio para hacer sus declaraciones, entre gritos de «cobarde».
Todos tuvieron su parte en la protesta, y el alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón (PP), también expresó su indignación por no haber sido invitado -según dijo- a la reunión de alcaldes que convocó Sanidad, «una muestra -a su juicio- del desprecio de la conselleria hacia los vecinos de Torrevieja». Un encuentro entre Barceló y los responsables de los municipios que dependen del departamento de Torrevieja, y al que sólo fueron invitados, según el PP, los regidores socialistas.
La Conselleria ha matizado sin embargo que el alcalde de Torrevieja fue invitado expresamente al encuentro. Fuentes del equipo de gobierno del PP confirmaron que recibieron una llamada a través de un concejal socialista de Torrevieja sobre las once de la mañana para invitar al alcalde al encuentro previsto a las 12. El alcalde estaba haciendo deporte, en un día festivo, y no pudo ser localizado. Tampoco podía haber asistido a tiempo, de ahí su nota de prensa posterior. También se expresó ayer en el mismo sentido el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, al igual que José Pérez de Pilar de la Horadada.
