De la discriminación negativa, que supuso el trato del Ejecutivo central al relegar a la provincia a la cola de la inversión por habitante en los Presupuestos Generales del Estado para 2022, a la positiva, la que apunta el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para tratar de enmendar el agravio del Gobierno a Alicante. Puig anunció este miércoles una inyección de 85 millones de euros para la provincia de los fondos que recibe del Estado y que puede repartir a su conveniencia. Así, dos serán las actuaciones a las que se destinará ese dinero, a obras en el TRAM, con 45,6 millones, y a financiar al 100% las obras que restan por hacer en la Vía Parque de Alicante, con 40 millones de euros.
Puig, en una entrevista en la Cadena SER, criticó que en las inversiones regionalizadas de los Presupuestos «no se ha tenido la suficiente capacidad de entender las necesidades de Alicante», en una crítica hacia el Ejecutivo que dirige el socialista Pedro Sánchez, y reclamó una solución a dos de los proyectos que se han quedado fuera de las cuentas presentadas por el Ministerio de Hacienda, como la conexión ferroviaria con el aeropuerto y la mejora de la red de Cercanías en la provincia.
Así, para acercar las inversiones al peso poblacional que tiene la quinta provincia de España, Puig ha decidido destinar a Alicante 45,6 de los 100 millones de euros de los fondos europeos de recuperación «Next Generation» en movilidad sostenible que le corresponden a la Generalitat, y que fueron aprobados el martes por el Consejo de Ministros, en concreto para mejoras en el TRAM. Esto supone, como recalcó el jefe del Consell, el 45% de estos fondos, con el objetivo de ir compensando la escasez de inversiones en los Presupuestos del Estado, toda vez que los 183,5 millones de euros consignados para infraestructuras y dotaciones en este territorio suponen un 38% menos que las del ejercicio anterior, y apenas un 15% de lo que se invertirá en el conjunto de la Comunidad, y que le dejan como el farolillo rojo de toda España, con solo 97,7 euros en gasto por habitante.
Así, según ha podido saber INFORMACIÓN, de los 45,6 millones para actuaciones en el TRAM, la mayoría, un total de 23, serán para duplicar la vía y electrificarla entre el apeadero del Hospital de La Vila y el de Terra Mítica, por un lado, y en otros tramos entre La Vila Joiosa y Benidorm, en la línea 1. Otros 10 serán para digitalización de servicios del TRAM en Alicante. La línea 9 se llevará los 12,6 millones restantes para construir los nuevos viaductos de Algar y Mascarat y duplicar la vía en el tramo entre el apeadero del Albir y la estación de Altea. Estas inversiones en infraestructuras, financiadas por la UE, podrán ejecutarse hasta 2025 y la digitalización hasta 2026.
Puig, además, y tal como anunció al día siguiente de conocerse el proyecto de Presupuestos con el objetivo de frenar el golpe a la provincia, hará uso también, para compensar a la provincia, de los 300 millones de euros que el Estado destinará en las cuentas para 2022 a la Comunidad Valenciana y que gestionará de forma directa el Consell. Así, de los 200 millones dispuestos para infraestructuras (otros 100 son para proyectos de movilidad sostenible) más de 40 serán para financiar en su totalidad las obras que quedan para completar la Vía Parque en la ciudad de Alicante. La actuación será doble. Por un lado se desdoblarán los carriles en el tramo en el que solo hay uno por dirección, pasando así de dos a cuatro. Por otro, se llevará a cabo la ampliación de esa Vía Parque hasta la EUIPO. Eso sí, para llevar a cabo la actuación primero el consistorio alicantino debe expropiar los terrenos y cederlos a la Generalitat, para lo que Puig pidió celeridad al alcalde de Alicante, el popular Luis Barcala. «Estamos dispuestos a financiar la obra al 100%, lo único que pido al Ayuntamiento es que haga su trabajo y expropie y ceda los terrenos», incidió el presidente de la Generalitat.
Además de la Vía Parque, fuentes de presidencia del Consell aseguran que habrá más inversiones, dentro de esos 300 millones, para acabar con el «desajuste», en palabras del propio Ximo Puig, que hay en la provincia de Alicante y que aún no se han definido. De esta forma, Puig trata de calmar los caldeados ánimos que los Presupuestos han provocado entre distintos sectores alicantinos por el agravio a la provincia.
Carta
Puig, precisamente, ha respondido a la carta que le envió el presidente del PPCV, Carlos Mazón, buscando una alianza para enmendar los Presupuestos. El jefe del Consell se ha mostrado dispuesto a reunirse con Mazón e, incluso, a apoyar las enmiendas en las que coincidan. Sin embargo, los tres partidos del Botànic, -PSPV, Compromís y Unides Podem- cerraron la puerta a esa alianza porque dijeron no fiarse de la oferta de Mazón. «No vamos a hacer su trabajo», señaló el tripartito, que calificó la iniciativa de «postureo» y «maldita broma». Algo que molestó al también presidente de la Diputación, que lamentó que «mientras Puig accede a reunirse conmigo, sus representantes en Las Cortes lo rechazan». «No querrán que se le vean las vergüenzas», zanjó Mazón.
