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Puig y Mazón se acercan a un frente común en la financiación mientras se alejan con la tasa turística

El jefe del Consell y el líder del PPCV rompen el hielo y acuerdan abordar las alegaciones a la propuesta del Gobierno - El popular ofrece una alianza contra el impuesto a las pernoctaciones y Presidencia alega que todavía no existe

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el presidente del PPCV, Carlos Mazón, hoy, en el Palau.

El presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, recibió este lunes, por primera vez de forma oficial, al presidente del PPCV, Carlos Mazón, seis meses después de que se pusiera al frente de la sala de mandos de los populares valencianos. El encuentro evidenció, en cierta manera, un deshielo entre los líderes de los dos principales partidos de la Comunidad, tras casi medio año de absoluta frialdad. A partir de ahora, está por ver cómo evoluciona la recién estrenada relación institucional. Mazón, que venía reclamando la cita desde hace más de dos meses, se presentó en el Palau con una batería de propuestas concretas con las que pretende, según explicó, pactar asuntos que considera claves para la Comunidad. Algunos de ellos coinciden a grandes rasgos con la agenda de prioridades del jefe del Consell. Por ejemplo, en materia de defender los intereses de la región en la batalla por la financiación autonómica, una cuestión fundamental en la que todo apunta a que se podría forjar una alianza. También se abordó la reivindicación sobre mantener el trasvase Tajo-Segura o la exigencia de mejorar el servicio de los trenes de Cercanías. Cosa distinta será que, finalmente, fructifiquen acuerdos concretos, y menos todavía en temas como la controvertida tasa turística. El popular propuso al presidente autonómico sellar un frente común para frenar su aplicación, una oferta que no tuvo respuesta, al menos pública, por parte del líder del Gobierno valenciano, pues desde Presidencia interpretan que el impuesto a las pernoctaciones no existe por el momento y, por tanto, no se precisa mover ficha al respecto. La reunión de cerca de una hora celebrada entre ambos mandatarios ha tardado más de dos meses en llevarse a efecto desde que fue solicitada por Mazón, no obstante, todo apunta a que el encuentro podría repetirse en menos de un mes.

Según trasladaron desde el PPCV, el presidente de la Generalitat se mostró predispuesto a abordar con el principal líder de la oposición la postura que la Generalitat mantendrá frente al Ministerio de Hacienda a la hora de presentar las alegaciones a la propuesta sobre el criterio de población ajustada para definir el nuevo reparto de fondos estatales entre las comunidades. El popular defendió que también Génova cree que el criterio poblacional debe ser el principal eje sobre el que pivote el sistema de financiación y que la Comunidad no puede salir de nuevo perjudicada, al tiempo que dejó claro que su defensa de los intereses de la Comunidad estará por encima de las siglas en las que milita. Con ese escenario, todo parece indicar que se producirá un nuevo encuentro con Puig antes del 31 de enero que, de salir bien, podría suponer una potente alianza a la hora de fijar las reivindicaciones ante el departamento que dirige María Jesús Montero. Y le ofreció, además, ampliar ese frente común para elevar la voz ante el Ejecutivo central en asuntos como las inversiones estatales en la Comunidad, las políticas para la recuperación o la defensa del trasvase Tajo-Segura. Aún así, en el entorno del también presidente de la Diputación de Alicante expresan dudas sobre que, al final, ese nuevo encuentro se produzca y que, en cualquier caso, se tenga en cuenta el posicionamiento del primer partido de la oposición, pues recuerdan que el primer encuentro con Puig se ha demorado durante seis meses. Un encuentro que para Mazón supone un paso más en la pretensión de abrirse un hueco en la escena autonómica mientras que desde el círculo de Puig se apresuraron a remarcar que no supuso nada especial, que fue un encuentro más de los que el presidente mantiene con representantes de las diferentes formaciones políticas, aunque a nadie se le escapa que son ellos dos de los principales protagonistas que, salvo sorpresas, están llamados a medirse en las urnas en las próximas elecciones, previstas en principio en 2023.

Bajada de impuestos

Consciente de que el encuentro levantaba cierta expectación, Mazón acudió a la cita de este lunes con diversas propuestas concretas con las que pretendía, tal y como aseguró, acercar posturas con el jefe del Consell, si bien no dejó pasar la oportunidad para cimentar su discurso crítico con las políticas del Gobierno del Botànic y, al mismo tiempo, remarcar algunos de los ejes sobre los que pivota la agenda del PP, como la necesidad de acometer una bajada de impuestos en lo que califica como un «infierno fiscal». De hecho, expresó que bajar los impuestos «no solo es urgente y necesario, sino que es una obligación moral». En materia sanitaria, Mazón reclamó a Puig la puesta en marcha de medidas que siguen la estela de otras comunidades gobernadas por el PP, como Madrid o Galicia, para establecer puntos para la realización de test de antígenos y PCR gratuitas, reclamó que se active un plan de refuerzo de la atención primaria y que se facilite información permanente a ayuntamientos y diputaciones sobre la evolución de la pandemia. Todo ello ante un contexto que calificó como preocupante en la Comunidad.

Y no solo en materia sanitaria, sino también por el «bloqueo» de políticas sociales o las ayudas para hacer frente a la pobreza energética. Dijo además que a la ya de por sí situación complicada, se unen otras derivadas que perjudican a los intereses regionales, como es el caso de la tasa turística. «Es un golpe más, es un error que además llega en el peor momento y que cuenta con el rechazo de todo el sector. En manos de Puig está pararla, debe reconsiderar su cesión a sus socios de Gobierno», enfatizó Mazón, quien le ofreció los votos del PP para frenar la propuesta legislativa en las Cortes y para bloquear la aplicación efectiva del impuesto a las pernoctaciones desde los ayuntamientos. Desde Presidencia de la Generalitat, explicaron que durante el encuentro con Mazón, como no podía ser de otra manera, se abordaron los principales asuntos de la agenda política valenciana como la evolución de la pandemia, la financiación autonómica, la situación de las cercanías ferroviarias o el trasvase Tajo-Segura, entre otros. El jefe del Consell, según destacaron, escuchó las sugerencias de Mazón y, como siempre, «atenderá cualquier propuesta que favorezca al conjunto de la sociedad valenciana desde el consenso y el máximo acuerdo». En este sentido, desde Presidencia, recalcaron, se hace siempre una valoración positiva de este tipo de contactos institucionales. Fuentes autonómicas apuntaron además que el presidente y su Consell están centrados en estos momentos en la respuesta a la pandemia del coronavirus con el impulso de la vacunación y el refuerzo de la sanidad pública además de la recuperación económica y emocional, destacando además que Ximo Puig está plenamente comprometido con una reforma de la financiación justa para la Comunidad con la defensa irrenunciable del trasvase Tajo-Segura y con una solución que mejore el servicio de las Cercanías ferroviarias.

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