¿Cuáles son las claves del plan estratégico diseñado por Suma hasta el año 2025?

Tras realizar un análisis en profundidad de las debilidades y fortalezas que tiene el organismo, hemos propuesto una revisión para que en los próximos años nos convirtamos, de forma clara, en una entidad de gestión y recaudación tributaria de referencia a nivel nacional. Nuestro camino es generar el máximo valor a los ciudadanos y a las ayuntamientos de la provincia. Los objetivos estratégicos están encaminados a ganar eficiencia y a ubicar al ciudadano en el eje central del organismo.

"La reingeniería de procesos y la digitalización son las líneas de trabajo que estamos desarrollando para bajar los costes a los ayuntamientos"

Hablan de rebajar la carga fiscal a las entidades con las que trabajan, ¿de qué manera piensan conseguir este propósito?

Hace muy poco, la semana pasada, llevamos al consejo rector una rebaja de la tasa que cobramos a los ayuntamientos por los tributos de ingreso periódico, que es el gran grueso de la recaudación, unos 750 millones. Si juntamos la recaudación voluntaria con la ejecutiva, vamos a bajar el coste para los ayuntamientos, que es del 3,45%. La reingeniería de procesos y la digitalización son las líneas de trabajo que estamos desarrollando para ello.

Y el ciudadanos, ¿cómo se puede beneficiar de su trabajo?

Nosotros recaudamos los tributos municipales, pero los que son soberanos a la hora de diseñarlos son los ayuntamientos. Lo que podemos hacer es rebajar la tasa que cobramos por nuestra gestión y trasvasar nuestras ganancias de eficiencia. Ese dinero va a las administraciones municipales y son ellas las que pueden moderar la carga fiscal de los ciudadanos o mejorar las prestaciones que les ofrecen. Esa es una decisión unilateral dentro de la soberanía municipal.

¿Qué labor se está haciendo desde Suma para ayudar a los municipios que sufren la retirada de entidades financieras?

Lo primero que quiero es mostrar mi agradecimiento a los ayuntamientos más grandes, que no tienen ese problema, porque la tasa que les cobramos nos permite mantener una serie de servicios que por sí mismos no son rentables. El año pasado hicimos 13.690 itinerancias, en las que personal de Suma se desplazó, asistido por medios digitales, a los municipios en los que no tenemos oficinas. El 20% de esas itinerancias se han hecho en municipios con menos de 5.000 habitantes y sin entidad financiera.

"El contexto de la recaudación y la gestión tributaria cada vez es más competitivo, con mayor iniciativa privada"

¿Cuál es su hoja de ruta para convertirse en un organismo de referencia a nivel nacional?

Suma siempre ha sido un organismo referente a nivel nacional. Es cierto que el contexto de la recaudación y la gestión tributaria cada vez es más competitivo, con mayor iniciativa privada. Lo que pretendemos con el nuevo plan estratégico es que se nos visualice cada vez más. Hay organismos muy grandes en Barcelona o Madrid. Por eso queremos poner en valor las labores que hacemos más allá de la gestión tributaria, como las certificaciones de calidad que tenemos, la carta de servicios al ciudadano o los convenios fuera de la provincia.

Insiste en los servicios para los ciudadanos, ¿cómo logran su satisfacción al margen de las decisiones de los municipios?

Llegamos a ella por dos caminos. Uno es el de la carta de servicios, que hemos actualizado a lo largo de 2021 y que va a contar con un sello de excelencia. El otro es el de la proximidad, con nuestra atención en el día a día y el anclaje en el territorio. El año pasado hicimos 4,5 millones de atenciones al usuario, de las cuales el 10% fueron presenciales.

¿Cuáles son las herramientas tecnológicas que más utilizan?

En los últimos cuatro años nos hemos caracterizado por ser un organismo muy disruptivo en términos de innovación. Desde hace catorce meses estamos acercando más esas tecnologías a lo que es el día a día de la gestión tributaria. Un ejemplo es el uso de herramientas de inteligencia artificial para leer las matrículas de los vehículos. Hemos incorporado firmas biométricas, que nos suponen 450.000 euros en procesos de escaneado y de utilización de papel.

¿Cómo se conjuga el mayor uso tecnológico con la lucha contra la brecha digital?

En marzo pusimos en marcha nuestra aplicación con las prestaciones básicas. Hemos hecho campañas de publicidad y le hemos dado visibilidad en la página web. Es cierto que no se ha producido un proceso masivo de descarga. Vamos a esperar que se produzca con la llegada del segundo pago del periodo voluntario, en la segunda mitad del año. Son procesos progresivos, como en el que nos sucedió cuando introdujimos el pago por Bizum, que se ha convertido en un método bastante importante.

¿El blockchain forma parte de las herramientas que usan?

En el último congreso de inteligencia artificial que patrocinamos presentamos un proyecto piloto de tecnología blockchain para el cobro de sanciones. Estamos inmersos en otro proyecto con una entidad financiera para, mediante blockchain, ver todas las cargas tributarias que tiene una vivienda de forma actualizada. Es otra tecnología disruptiva que no está teniendo aplicación inmediata en el día a día del organismo. Está costando un poco más el encaje pero ya hemos hecho dos proyectos pilotos.

"Vamos a seguir incidiendo en la atención de proximidad, sobre todo en los municipios con riesgo de despoblación"

Más allá del plan estratégico, ¿a que aspectos van a prestar más atención en el corto plazo?

Vamos a seguir incidiendo en la atención de proximidad, sobre todo en los municipios con riesgo de despoblación, vamos a implementar una nueva facilidad de pago y queremos avanzar en cinco delegaciones de gestión tributaria que están pendientes en municipios de la provincia. Estos son los objetivos para los próximos nueve meses, al margen de que seguiremos mejorando la recaudación y la eficiencia.