El nuevo discurso que proyecta el PP está repleto de guiños al autonomismo, a la moderación y a la centralidad, y ahora también a la necesidad de avanzar hacia una concepción de las infraestructuras en España que supere el modelo radial, con Madrid como centro de todo, que ha imperado durante siglos y que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, consideró ayer trasnochado.
Lo dijo ante la cúpula del empresariado valenciano, que mantiene como reivindicación histórica el corredor mediterráneo, una causa que Feijóo considera justa al tratarse de un proyecto que trasciende a una única autonomía.
Es justo porque supone un motor de riqueza para el conjunto de España y porque entronca con la visión periférica del Estado que dijo tener Feijóo, la de muchos centros y no uno solo, en referencia a Madrid, ciudad a la que no citó directamente en su intervención en un hotel de València ante los empresarios de AVE. En su discurso también señaló que, del mismo modo, la reforma del modelo de financiación era una reclamación de justicia. Una visión de las necesidades de las periferias que ofrece el expresidente de la Xunta de Galicia y de la que adolecía el anterior líder del partido, Pablo Casado. Por eso el discurso de Feijóo suena tan distinto. Nada que ver con el anterior. Incluso tiene diferencias con el de hace unas semanas en el mismo foro de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Según el dirigente gallego esa concepción radial de España se impuso cuando Europa suponía una amenaza, pero ya no tiene sentido con la integración en la Unión Europea, porque las exportaciones se dirigen hacia el continente y por tanto de ahí viene la riqueza. Ante los empresarios, Feijóo también habló de la necesidad de acometer una reforma fiscal que concretó en el hecho de que si el Gobierno ha recaudado 15.000 millones más por los precios desbocados como consecuencia de la inflación tiene sentido que una parte de ese dinero se devuelva con la rebaja del IRPF a las rentas que ingresan menos de 40.000 euros. Cualquier otra cosa es «hipocresía fiscal», señaló.
Estabilidad frente al Gobierno de Sánchez y sus socios y disminuir las incertidumbres es la receta de Núñez Feijóo que anuncia que no es necesario que el PP haga oposición porque ya la hacen los socios de gobierno y porque el ciudadano sabe que la suya es la única alternativa posible.
Situación económica preocupante
El líder de los populares dibuja una situación económica muy preocupante para España, el país más endeudado de la UE y con el doble de paro que la media europea, además de la inflación y el disparado precio de los bienes de primera necesidad.
El presidente de AVE, el naviero Vicente Boluda, presentó a Feijóo con un discurso en el que señaló que la Comunidad Valenciana se niega a ser «una región pedigüeña», porque tiene mucho que aportar. Según él, Feijóo tiene «claras posibilidades de ostentar la presidencia del Gobierno en el corto plazo» y consideró inaudito que València y Barcelona no estén conectadas por alta velocidad cuando hay 30 capitales de provincia unidas, ello pese a que en las autonomías del Mediterráneo vive la mitad de la población y se genera el 50% de la riqueza.
Feijóo, que ya inició en València su campaña para convertirse en líder del partido, ha iniciado este jueves en València una gira de dos días por la Comunidad Valenciana que le lleva hoy a Benidorm.
Después del debate del estado de la nación donde todos los analistas vieron reforzado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Feijóo ha recibido un espaldarazo importante esta semana con el sondeo del CIS que le sitúa por primera vez por delante del líder socialista. En ese contexto, Feijóo y la dirección del PP en la calle Génova ponen a la Comunidad como territorio prioritario. Tras las mayorías en Galicia, Madrid o Andalucía, la valenciana es clave para que en las próximas generales, que deben celebrarse antes del final de 2023, Feijóo pueda alcanzar la Moncloa.
Un empuje para Mazón
Para ello es necesario que el líder de los populares valencianos, Carlos Mazón, aproveche el «efecto Feijóo» en las autonómicas de 2023. En ese marco se presenta la visita de dos días del dirigente gallego a tierras valencianas. Hoy estará en Benidorm.
La visita tiene también el objetivo de promocionar a Mazón en la carrera hacia el Palau de la Generalitat. El líder del PPCV tiene como gran hándicap su escaso grado de conocimiento entre la ciudadanía valenciana. En el PP ponían ayer en valor que es la primera vez que un líder nacional del partido visita un barrio de València, con el encuentro en Torrefiel en un centro de Cáritas que atiende a personas en riesgo de exclusión. La de Torrefiel, con personas necesitadas, era la imagen que pretendía Feijóo para proyectar el mensaje de que le preocupa la mala situación de quienes menos tienen.
Por la tarde, Feijóo presidió la junta directiva regional y después inauguró la sede del PPCV en la calle embajador Vich de la capital valenciana. Mazón recogió el guante de Feijóo de tener candidatos reconocibles pronto para las municipales y dijo que los presentará todos el 9 d’Octubre.
