La escalada imparable que ha venido registrando el precio de la electricidad ha puesto en jaque a las economías familiares, al tejido productivo y, también, a la Administración pública. No obstante, unas instituciones han podido sortear mejor que otras los estragos que ha venido produciendo el encarecimiento de este suministro esencial, especialmente a raíz de la invasión de Ucrania por parte de Rusia y teniendo en cuenta las consecuencias derivadas de este conflicto. Un buen ejemplo de ello son los 138 municipios y entidades adheridas a la central de compras de la Diputación de Alicante. Todos ellos han podido esquivar los récords que ha marcado el coste del suministro de energía al estar adheridos al acuerdo marco que rubricó en su día la institución provincial, lo que permitió pactar un precio fijo de la luz. 

El ahorro global, según fuentes de la Diputación, ha alcanzado los 15 millones de euros en los últimos dos años entre los asociados a esta tarifa pactada y, además, se ha garantizado que toda esa electricidad proceda de fuentes 100% renovables, un plus en un momento en el que crece la concienciación social sobre frenar los efectos del cambio climático y apostar por las fuentes renovables. 

Con los buenos datos obtenidos, que viene a suponer un importante ahorro en tiempos de crisis energética, el organismo provincial ultima ahora una reedición de ese contrato negociado y, con laque está cayendo, se espera que las solicitudes de adhesión sean incluso más elevadas. Todo teniendo en cuenta la volatilidad que ha venido experimentando el mercado energético, especialmente en 2022, y con unas perspectivas a corto plazo marcadas por la incertidumbre

El diputado de Contratación, Juan de Dios Navarro, explicó que la institución ha alcanzado un acuerdo con Iberdrola para impulsar el nuevo contrato marco de suministro de energía para que los ayuntamientos puedan sortear la subida de tarifas y, en definitiva, poder garantizar estabilidad. El proceso ha sido doble. En un primer momento, la Diputación sacó el contrato a licitación pero la única empresa que concurrió realizó una oferta que superaba en un 80% la tarifa fijada en las bases. El concurso quedó desierto y se inició entonces un segundo proceso, esta vez a través de un negociado sin publicidad con el que sí se llegó a un acuerdo. La tarifa pactada, según fuentes de la Diputación, es de 142,91 euros el megavatio hora, lo que ha permitido un ahorro del 50% respecto a los precios ofertados en una primera licitación «que se consideró inaceptable» el pasado mes de febrero». El diputado explicó que, dada la inestabilidad del mercado eléctrico, se ha permitido realizar ahora un mayor ajuste. Con todo, el coste será más del triple que en el que figuraba en el contrato que estaba en vigor hasta ahora, que se cuantificó en 41 euros el megavatio. Claro que se firmó en un momento en el que no se podía ni prever una crisis de la magnitud que ha alcanzado en la actualidad. De hecho, Navarro recordó que en determinados momentos se ha llegado a pagar hasta 700 euros el megavatio en el mercado.

 «Desde la Central de Compras y la Diputación tenemos claro que nuestros clientes son los 141 municipios, en este sentido seguimos trabajando y prueba de ello es que ya tenemos adhesión a esta nueva adjudicación. Ahora, confiamos en que todos los ayuntamientos puedan sumarse a esta ventajosa oferta y disfrutar de sus beneficios», destacó Juan de Dios Navarro. El contrato se renovará a partir del próximo mes de septiembre, «reportando importantes beneficios económicos y medioambientales a los municipios», puntualizó.

Los consistorios que desean adherirse a este acuerdo puede recibir asistencia técnica en el procedimiento de adjudicación de los contratos, con la elaboración de las memorias técnicas necesarias para concretar la oferta económica que mejor se adapte a sus necesidades y con el asesoramiento en todo el procedimiento de adjudicación. 

Eficiencia energética

Por su parte, el diputado de Medio Ambiente, Miguel Ángel Sánchez, ha repasado los distintos proyectos y actuaciones que la Diputación de Alicante está desarrollando en la actualidad con el fin de ayudar a los municipios del territorio a reducir el coste de la energía y su consumo energético. En este sentido, Sánchez ha destacado que la institución trabaja desde 2015 en su propio Plan Provincial de Ahorro Energético que contempla, entre otras acciones, la creación de puntos de recarga para vehículos eléctricos, la instalación de placas fotovoltaicas para autoconsumo o la renovación de los sistemas de alumbrado público.

La apuesta de la Diputación por la sostenibilidad queda patente también a través de las distintas convocatorias de ayudas que impulsa en esta materia, como la destinada a la redacción de Planes de Acción de la Agenda Urbana o la dirigida a la elaboración de estudios relacionados con la sostenibilidad energética municipal, que incluye la creación de Planes de Movilidad Urbana Sostenible y de estudios para el desarrollo e implementación de Comunidades Energéticas Locales, apuntan fuentes de la institución.

Asimismo, destacan los 6,2 millones de euros que la institución ha destinado en esta legislatura para el impulso de la movilidad sostenible y la reducción de la contaminación atmosférica en los municipios de la provincia.

“Desde la Diputación de Alicante hemos hecho un importante esfuerzo inversor entre 2019 y 2022 que nos ha permitido duplicar el presupuesto del Área de Medio Ambiente y llevar a cabo medidas directas, efectivas y, sobre todo, reales”, señaló el diputado.

Finalmente, Sánchez hizo referencia a la nueva línea de subvenciones de dos millones de euros impulsada dese el Área de Asistencia a Municipios para ayudar a los consistorios más pequeños a minimizar el impacto económico de la subida de los precios de la energía y los combustibles en las instalaciones públicas municipales.