Aunque la espiral inflacionista y los problemas económicos que están sufriendo las familias para llegar a final de mes están marcando buena parte de los discursos políticos en los primeros compases del nuevo curso político, los aspirantes a la Generalitat Valenciana no quieren descuidar otros aspectos de carácter social, entre los que sobresalen las cuestiones ligadas a la educación y la sanidad. Este es el caso del Partido Popular. Aunque su líder, Carlos Mazón, se enzarzó la semana pasada en un debate con el jefe del Consell, Ximo Puig, a raíz de las medidas fiscales, desde el principio ha querido evidenciar un giro social. En este contexto, este viernes ha presentado su primera medida de carácter electoral en materia de educación, en la que la gratuidad en el tramo de 0 a 3 años es la propuesta estrella.
El plan presentado por el PPCV, que fomentará una escolarización de los más pequeños gratuita, sin papeleo y universal, permitiría un ahorro para las familias que oscilaría entre los 3.200 y los 4.600 euros, en función del tramo en el que esté estudiando el menor. El coste de esta medida alcanzaría los 277,85 millones, que los populares pretenden obtener a través de la racionalización del gasto público y de la eliminación de asesores, directivos y cargos políticos. El propio Mazón ha cargado en más de una ocasión contra lo que considera como «carga excesiva» de asesores que arrastra la Generalitat, un argumento que, por otra parte, la oposición en la Diputación ha empleado para desacreditar su gestión al frente del equipo de gobierno de la institución provincial.
Los populares también pretenden destinar el sobrante del ahorro cuantificado a incrementar las becas de comedor para las rentas más bajas. «No tenemos ninguna duda de priorizar la escolarización de los niños más pequeños a los sillones», ha añadido Mazón sobre una medida que, por último, también tiene entre sus objetivos fomentar la conciliación y la natalidad. «Las familias deben poder elegir dónde quieren llevar a sus hijos, con la mejor calidad asistencial y educativa», ha apostillado el político alicantino.
Portavoces
El líder del PPCV ha presentado su propuesta acompañado por los portavoces de Educación y Hacienda del grupo popular en las Cortes Valencianas, Beatriz Gascó y Rubén Ibáñez. Descontando los 68 millones contemplados en los Presupuestos de 2022 para el bono infantil y la contratación de docentes y educadores, la necesidad presupuestaria para la gratitud universal del primer ciclo de Educación Infantil sería de 204,85 millones. Ese dinero se obtendría de convertir en direcciones generales la Vicepresidencia segunda y Conselleria de Vivienda y la Conselleria de Transparencia.
Al margen de esta propuesta en materia de educación, y dentro del mayor peso que las cuestiones sociales van adquiriendo en el discurso del líder popular, Mazón también ha abordado la «dejadez» para reducir las listas de espera sanitarias y ha insistido en poner un tope que quede fijado por ley para las pruebas quirúrgicas o de especialidades. «Hay que poner todos los recursos públicos y privados a disposición de la Comunidad Valenciana, sin complejos», ha finalizado su intervención.
