El Gobierno de España está ultimando la fecha del 9 de diciembre para la celebración en Alicante de la Cumbre Euromediterránea (9MED), una cita internacional que se tenía que haber celebrado en la capital de la provincia el pasado 30 de septiembre y que se tuvo que aplazar por el positivo en covid del presidente Pedro Sánchez. Este encuentro contará con la presencia de mandatarios de nueve países europeos correspondientes a la ribera mediterránea: España, Francia, Italia, Grecia, Portugal, Malta, Chipre, Croacia y Eslovenia. Según informa la agencia Efe, fuentes de la organización avanzan que la nueva fecha en la que se está trabajando es en la del viernes 9 de diciembre.

La cita inicial se iba a desarrollar el pasado 30 de septiembre en las instalaciones de Ciudad de la Luz, Casa Mediterráneo y la Euipo, pero 24 horas antes fue aplazada por un criterio de precaución debido al positivo de coronavirus del presidente español, que ejerce de anfitrión. A esa reunión también estaba confirmada la asistencia de la presidenta de la Comisión, Úrsula von der Leyen, y del presidente del Consejo, Charles Michel, como invitados especiales, y antes de la cumbre Pedro Sánchez tenía organizados encuentros bilaterales en la sede de Casa Mediterráneo con los primeros ministros de Eslovenia y Grecia, Robert Golob y Kyriakos Mitsotakis, respectivamente.

Estos encuentros, al margen de unificar posturas en materias como el suministro energético, tenían el objetivo de resaltar la importancia de la vecindad entre los países del sur del continente europeo. Sánchez tenía que ejercer como anfitrión en una cumbre de carácter informal con la que se buscaban impulsar las interconexiones gasísticas en la Unión Europea y las medidas de ahorro como parte de la necesaria solidaridad continental. Otro de los propósitos era el de lograr que la opinión del sur fuera escuchada y tenida en cuenta, según habían ido informando desde Moncloa en las semanas previas a la cita internacional que se tenía que haber celebrado en Alicante.

En la cumbre del conocido como 9MED también se esperaba que tanto España como Francia trasladaran al resto de los países participantes su postura sobre las interconexiones energéticas, después de que el presidente galo, Emmanuel Macron, dijera que no veía necesario acometer el proyecto del gaseoducto Midcat a través de Cataluña, una postura que había variado posteriormente. En definitiva, el objetivo final de la cumbre venía a ser explorar todas las herramientas disponibles para reducir la dependencia energética de Rusia por parte de Europa. El colofón de la cita iba a ser una comparecencia conjunta de los nueve mandatarios, de la que saliera una declaración sobre los principales temas abordados a lo largo de toda la jornada.