La carrera electoral entre Ximo Puig y Carlos Mazón sigue su curso, con la vista puesta en las elecciones autonómicas del próximo año. Cada acontecimiento es empleado para buscar rédito político. El último episodio se vive con los presupuestos de la Generalitat Valenciana para el próximo año, presentados este lunes. El presidente del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV) ha salido a la palestra para afirmar que las cuentas autonómicas “muestran la desesperación electoral” de Puig y criticar el aumento de impuestos y tasas y la subida de sueldos en el Gobierno valenciano. En este último caso, cabe recordar que la política fiscal y la bajada de impuestos es uno de los grandes caballos de batalla del PPCV. En cuanto a los sueldos, la Diputación de Alicante, institución presidida por Mazón, ha anunciado este mismo miércoles que va a congelar los sueldos de los diputados por cuarto año consecutivo. En este sentido también, el PSPV-POE, a través de su secretario de Organización, José Muñoz, ha acusado al alicantino de ser uno de los presidentes “mejores pagados de España”, con un sueldo que roza los 90.000 euros y que es superior al de Puig.
Gobierno valenciano
“Año tras año vuelven a aparecer las mismas inversiones que el Gobierno valenciano es incapaz de ejecutar. Estas cuentas agónicas ratifican la necesidad de cambio en la Generalitat Valenciana”, ha afirmado el líder autonómico de los populares, antes de añadir: “Es una burla que el Gobierno valenciano hable de una reforma fiscal con la que el máximo ahorro serán 100 euros al año para algunas personas, mientras que todos los altos cargos de la Generalitat, incluido Puig, se van a subir el sueldo más de 3.000 euros”. Mazón considera que los mensajes lanzados por el Consell a través de sus presupuestos llegan en el peor momento posible, en el que se encadenan las consecuencias de la pandemia con las de la guerra de Ucrania, a lo que hay que sumar la crisis energética y la inflación.
Las declaraciones de Mazón han tenido lugar tras la reunión que ha mantenido este miércoles con la síndica del grupo popular en las Cortes Valencianas, su número dos, María José Catalá, y la celebración del consejo de dirección del grupo parlamentario para analizar los presupuestos de la Generalitat para 2023. “Son los antipresupuestos, unas cuentas que no se sostienen. Es una vergüenza que se presente esto con la que está cayendo y la situación que están atravesando los ciudadanos”, ha insistido el dirigente popular. Del mismo modo, ha denunciado que el Gobierno autonómico cuenta con “el mayor número de la historia de asesores, enchufados y altos cargos”. Sobre la reforma fiscal, igualmente, ha reiterado que la propuesta del PPCV “es la que necesita la Comunidad Valenciana porque representa un alivio para los bolsillos de los salarios más bajos”.
Reforma fiscal
En materia fiscal, Mazón ha vuelto a cargar de nuevo contra la tasa turística, impuesto que grava las pernoctaciones y que sigue el curso de su tramitación parlamentaria en las Cortes Valencianas. En este apartado, cabe recordar que, hace pocos días, el alicantino lamentó que la tasa “echa por tierra el trabajo realizado durante décadas” en la Comunidad Valenciana y la provincia de Alicante en materia turística. “Hay impuestos a las grandes superficies, a los vehículos de motor, a la industria y se aumenta en un 10% cerca de 4.500 tasas. No son los presupuestos que necesitamos”, ha lamentado el dirigente popular. Por último, ha apostillado: “Son una cuentas de desesperación electoral, que hablan de inversiones que vuelven a ser papel mojado, porque la Generalitat no es capaz de ejecutar ni el 15% de las inversiones que anuncia”.
En respuesta, el jefe del Consell, preguntado por las críticas de la oposición con respecto a la subida de sueldos prevista para el Gobierno valenciano y los altos cargos, ha defendido que el Ejecutivo que preside se caracteriza por la austeridad . «Pueden mirar lo que cobran los presidentes del PP de otras comunidades que son un referente para los populares valencianos», ha dicho Puig, quien añadió que en el caso de la Comunidad sucede lo contrario. «Lo que hemos hecho es adecuarnos a lo que se va a subir a los funcionarios. Somos servidores públicos», ha dicho.
El líder autonómico ha tildado como «cínico» que aquellas personas que cobran más que el presidente de la Generalitat digan que es un escándalo, en alusión a Mazón. «Lo que es un escándalo es que personas con menos responsabilidad cobren bastante más. Es de un cinismo y de un populismo que descarta a personas que deberían de ser rigurosas y ser conscientes de que la antipolítica no va a solucionar los problemas de los valencianos», ha zanjado.
El debate también ha llegado este miércoles a las Cortes. Los grupos que forman el Botànic -PSPV, Compromís y Unides Podem- consideran independiente la subida salarial del 4% a los altos cargos del Consell y el acuerdo para no aumentar los salarios de los diputados en esta proporción. «Este poder es legislativo y toma sus propias decisiones», ha destacado la síndica socialista, Ana Barceló. «Es necesario reivindicar la subida de los salarios», ha considerado el portavoz adjunto de Compromís, Carles Esteve. Por su parte, la portavoz adjunta del PPCV, Elena Bastidas, ha dicho que no entendía la subida «mientras a la ciudadanía se le reduce una ridiculez lo que pagan de impuestos».
