La Diputación de Alicante celebró el 14 de diciembre del año pasado el primer debate sobre el estado de la provincia, una cita que nació con el objetivo de poner de relieve las necesidades que tiene el territorio alicantino y ofrecer soluciones, aunque luego los diputados acabaran por dirigir sus intervenciones hacia asuntos más genéricos y los sempiternos conflictos institucionales entre la Diputación y el Consell. Este año la cita se volverá a repetir, pero lo hará con una gran novedad. El segundo debate de la provincia se adelanta un mes, ya que tendrá lugar el próximo jueves, día 17. Este cambio de fechas llega con un objetivo claro, según el equipo de gobierno, encabezado por el PP, con el apoyo de Cs. Pretenden de esta forma que aquellas propuestas que sean de utilidad para paliar los problemas de la provincia estén a tiempo de entrar en los presupuestos de 2023, los últimos del presente mandato.

Hemiciclo

Desde el equipo de gobierno se asegura que este debate trasciende más allá de los muros del Palacio Provincial y que, por este motivo, llevan meses recogiendo las situaciones que les trasladan desde todos los municipios alicantinos para ponerlas encima de la mesa durante la sesión en el hemiciclo. Las distintas realidades recogidas tienen un denominador común y hacen prever por dónde discurrirá buena parte de la cita: los efectos de la guerra de Ucrania, cuando aún no se habían superado por completo los de la pandemia, y sus consecuencias, sobre todo, en la economía de unas familias que cada vez tienen más difícil llegar a fin de mes.

Otro de los temas estrellas durante el debate, como ya se pudo ver en el pleno celebrado el pasado miércoles, será el nuevo agravio que ha sufrido la provincia en el reparto de los Presupuestos Generales del Estado y el esfuerzo que ha realizado la Generalitat en las cuentas autonómicas para tratar de corregir la desatención por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez. En este sentido, el equipo de gobierno de la Diputación ha venido afeando a los grupos de la oposición, PSPV-PSOE y Compromís, que no estuvieran presentes en la concentración que convocó la Cámara de Comercio el pasado día 3. «Hay que mostrar el ninguneo y agravio hacia una de las provincias que más aporta al PIB nacional», defiende el presidente, Carlos Mazón.

Misma línea

En una línea muy similar se expresa el portavoz de Cs, Javier Gutiérrez. «El debate tiene que servir para dar cuenta a la opinión pública del maltrato a las finanzas de la provincia. También hay que recordar el trato que nos da la Generalitat, que solo se acuerda de nosotros cuando se acercan las elecciones y nos ofrece sus migajas», apunta el político liberal, que también lamenta que los representantes del PSPV y Compromís «se comportan más como delegados del Consell que como diputados alicantinos».

Las frases

Por su parte, el portavoz de los socialistas, Toni Francés, prefiere destacar «las políticas aplicadas por Ximo Puig en la provincia», por lo que uno de los argumentos que llevará al debate del próximo jueves serán «los avances en digitalización y nuevas tecnologías», que, a su juicio, se traducen en hechos como las dos candidaturas que han presentado Alicante y Elche para convertirse en las sedes estatales de la inteligencia artificial y la agencia espacial.

En último lugar, una de las cuestiones que serán planteadas en el debate por el portavoz de Compromís, Gerard Fullana, será la del crédito de 4,5 millones aprobado para el centro de congresos de Elche. «A ningún municipio se le pagan los terrenos para sus infraestructuras y hay ayuntamientos muy enfadados», asegura.