La batalla a cuenta de los presupuestos de la Generalitat para 2023, y, en particular, la asignación para la provincia de Alicante en materia de inversión territorializada, mantiene enfrentadas a las dos fuerzas con mayor representación en las Cortes Valencianas. El PSPV-PSOE y el PP elevan el tono y acusan al otro de mentir para tratar de imponer su relato en torno a una cuestión, la de los fondos previstos para la demarcación alicantina, que se ha colocado en un lugar preferente de la agenda autonómica. Para el secretario de Organización y portavoz de Hacienda del PSPV-PSOE en la Cámara, José Muñoz, «el PP miente y maquilla los datos» porque son 610 millones los previstos en esa partida para Alicante. Para el jefe del PP de la Comunidad Valenciana y presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, las cuentas reservan solo 360,4 millones.

El debate, envuelto en una guerra de cifras, saltó a la palestra el lunes, en el marco de la sesión parlamentaria con las enmiendas a la totalidad de las cuentas. Siguió al día siguiente, con declaraciones cruzadas. Todo después de las dos concentraciones celebradas frente a la Subdelegación de Gobierno en Alicante para exigir inversiones justas para la demarcación por parte del Estado.

«En los presupuestos solo vemos 360 millones y no 610 específicos para Alicante», aseveró Mazón, en línea con lo que defendió un día antes el diputado Rubén Ibáñez en la Cámara autonómica. El líder del PPCV se preguntó si la provincia sólo merece el 19% de las inversiones que han sido presupuestadas por el Gobierno autonómico, liderado por Ximo Puig. Es por ello que se preguntó «dónde están los 250 millones que faltan». Los populares criticaron, además, que prácticamente la mitad de proyectos incluidos en las cuentas también se prometieron en años anteriores, sin ejecutar. «Puig tiene que dar explicaciones porque no vamos a dejar de defender todos los días la provincia de Alicante ante tanto desprecio. Ni Puig ni Sánchez han cumplido su palabra con la provincia, a la que siguen castigando sin las inversiones que necesita», dijo Mazón.

Muñoz, por su parte, afirmó que el PP «miente y maquilla los datos de forma partidista para intentar tapar que las inversiones en la provincia de Alicante se han multiplicado por siete desde el año 2015». Tildó como bulos las cifras que sostiene la derecha y dijo que «quien marginó a la provincia sin ningún tipo de miramiento durante años fueron los gobiernos del PP». El dirigente socialista remarcó las cifras que defendió el Consell, reiterando que los 610 millones en inversiones territorializadas suponen «un máximo histórico, con el 40% de los recursos destinados a la provincia», dos puntos por encima de su peso poblacional. Invitó a los populares a «apuntarse a clases de refuerzo de matemáticas» y dijo que «o no saben contar o no se han leído el presupuesto». 

Fuentes de la Generalitat suscribieron sus aseveraciones y defendieron la transparencia de un presupuesto que está colgado en internet para ser consultado. Utilizaron como argumento que en las cuentas proyectadas para la Vega Baja, que se agrupan bajo el paraguas del Plan Vega Renhace, figuran inversiones en municipios que, sin embargo, no aparecen en el cómputo del PP. De hecho, se recogen proyectos en 24 municipios, además de otros de carácter transversal para la comarca, mientras que el PP asegura que solo hay inversiones en una docena. «Normalmente es más fácil protestar que trabajar. Alicante lo que necesita es gente que trabaje y, a ser posible, que sepa sumar», enfatizaron desde la Generalitat.