El caso de Sant Joan se extiende: PP y Cs sondean listas únicas en otros cuatro municipios

Lo que se está viviendo en Sant Joan d'Alacant, con las conversaciones que se mantienen entre el PP y Ciudadanos para ir de la mano en las próximas elecciones municipales, tiene todos los visos de extenderse como una mancha de aceite. Y es que los contactos entre integrantes de ambas formaciones políticas para formar listas únicas ya afectan, al menos, a otros cuatro municipios de la provincia, como son Xixona, Mutxamel, Cocentaina y Muro, en una dinámica que va a ir a más. Los populares están viendo en el proceso de descomposición que afecta a Ciudadanos una oportunidad única para pescar a algunas de sus figuras más destacadas, mientras que los naranja también observan en este movimiento una solución para asegurarse su presencia en las instituciones locales.

Las negociaciones que se mantienen en Sant Joan d'Alacant entre el PP y Ciudadanos pueden convertirse en el detonante de una operación a mucha mayor escala de cara a los próximos comicios municipales, que acabe afectando a una buena parte de los municipios de la provincia de Alicante. De entrada, fuentes cercanas a la formación naranja han señalado que se están produciendo contactos en varias poblaciones, con la finalidad de sondear la posibilidad de elaborar listas en las que haya representantes de ambas formaciones políticas.

Una de las localidades en las que está habiendo conversaciones es Xixona, municipio que en la actualidad gobierna la socialista Isabel López con el apoyo del grupo municipal de Ciudadanos, a cuyo frente se encuentra el portavoz de los liberales en la Diputación de Alicante, Javier Gutiérrez, quien se ha mostrado como un firme defensor de los acuerdos con el PP. De hecho, las discrepancias que ha venido manteniendo con la dirección de su partido en relación a la política de pactos con otras formaciones políticas, y más en concreto con la moción de cesura de Orihuela, propiciaron que se le suspendiese temporalmente de militancia, a través de un expediente que se ha cerrado esta misma semana sin ningún tipo de consecuencia para el propio afectado, al que se le han devuelto todos sus derechos.

En Mutxamel, por otro lado, gobierna el popular Sebastián Cañadas, aunque también con el respaldo de Ciudadanos, con lo que, en este caso, un acercamiento entre ambos partidos de cara a las municipales no se antoja demasiado complicado.

La situación es completamente diferente en Cocentaina, donde componentes del PP y la formación naranja estarían haciendo números respecto a los rendimientos que les podría reportar una candidatura conjunta que permitiese desalojar del gobierno municipal a un partido socialista que viene encadenando mayorías un mandato tras otro. En estos momentos es Mireia Estepa la que se encuentra al frente del Ayuntamiento, aunque Rubén Muñoz le tomará el relevo como cabeza de lista.

Mucho más complejo es el contexto que se vive en Muro, donde el alcalde, Gabriel Tomás, pertenece al grupo de los no adscritos tras haber concurrido a las elecciones en las filas de EU. Gobierna gracias al respaldo de PP y Ciudadanos.

Negociaciones

Estos son los municipios en los que está habiendo conversaciones, aunque, en realidad, podrían ser bastantes más. Desde el PP explican que, en la actualidad, las únicas negociaciones que se mantienen de manera oficial son las de Sant Joan, aunque reconocen que se están produciendo contactos personales en otros municipios, siempre con el objetivo de sumar. En este sentido, destacan que la filosofía del presidente del partido en la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, es la de tratar de aglutinar a todos aquellos que comparten ideas y filosofía política, para generar un gran espacio de centro.

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Las discrepancias, aunque limitadas, pueden llegar a la hora de concretar la forma de presentarse a las elecciones, dado que pese a que se ha estado hablado de la posibilidad de confeccionar listas integradas por los dos partidos, en realidad las cúpulas tanto del PP como de Ciudadanos no lo ven viable. Para los componentes de la formación naranja que están sondeando los pactos, la fórmula ideal sería que sus siglas continuaran estando presentes, aunque también asumen que, finalmente, lo más probable es que no tengan otro remedio que concurrir a las elecciones al amparo de la candidatura popular.