La hoja de ruta del PP: moderación y atraer al centro pero sin veto a Vox

El PPCV sigue la línea marcada por Feijóo, en una estrategia que pasa por ocupar el espacio que deja Ciudadanos y con un goteo constante de fichajes desde la formación liberal uLos de Mazón se desmarcan de la polémica en Castilla y León

Alberto Núñez Feijóo y Carlos Mazón, el pasado verano en Alicante

Alberto Núñez Feijóo y Carlos Mazón, el pasado verano en Alicante / Jose Navarro

Borja Campoy

Borja Campoy

En el pleno de la Diputación celebrado el pasado lunes, el portavoz del grupo popular, Eduardo Dolón, sorprendió con unas declaraciones en el debate sobre la reapertura del CICU en Alicante, al apuntar que «el centroderecha quiere mejorar el servicio y que regrese a las provincia». El también alcalde de Torrevieja no se refería al Partido Popular ni a la derecha, sino que dejaba bien a las claras el espacio que su formación se ha propuesto ocupar en las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán en mayo. Las declaraciones de Dolón en el pleno de la institución provincial daban continuidad a las de otro peso pesado del PP, el vicesecretario de Organización, Juanfran Pérez Llorca, que al ser preguntado por el alcaldable en Elda, señalaba que «lo ideal es que haya una lista conjunta que unifique a todo el centroderecha». 

Este tipo de manifestaciones no hacen otra cosa que confirmar que el partido que dirige Carlos Mazón ha interiorizado las consignas que llegan desde la ejecutiva nacional que encabeza Alberto Núñez Feijóo: moderación, ocupar todo el espacio del centroderecha y alejarse de polémicas como la que se está viviendo estos días en Castilla y León con Vox y el aborto. Eso sí, desde las filas del PP no ponen líneas rojas a un pacto con la formación de ultraderecha si fuera necesario para desbancar al Botànic del poder autonómico. Con todo, en el entorno del partido apelan a la prudencia y a esperar al desenlace de la votación en las urnas, ya que recalcan las diferencias que habría entre un acuerdo como el que rige en Castilla y León y un resultado como el que obtuvo Juan Manuel Moreno Bonilla en Andalucía.

Discurso

El propio Mazón, tanto en su discurso como en su manera de actuar, está intentando establecer una línea moderada. Por ejemplo, en la Diputación, buscó el pasado diciembre hasta última hora alcanzar un acuerdo sobre los presupuestos con los grupos de la oposición, PSPV-PSOE y Compromís, y recalcó que iba a mantener la negociación abierta hasta el último minuto. El pasado martes, en la entrevista de ámbito nacional que concedió a Antena 3, rehuyó las polémicas y apostó por poner el foco en los que han sido algunos de sus principales caballos de batalla durante los últimos meses, como la reivindicación del trasvase Tajo-Segura o la rebaja de la presión fiscal.

En este contexto también entra en juego el proceso de descomposición por el que atraviesa Ciudadanos y el goteo constante que se está produciendo desde las filas liberales hasta el PP. Aquí se pueden englobar fichajes que ya se han consumado, como los de Pachi Pascual en San Vicente del Raspeig o Javier Mora en Granja de Rocamora; negociaciones en marcha, como la de Sant Joan d’Alacant; movimientos que se anunciarán en breve, como el de Francisco Sánchez en Elda; o proposiciones como la que le realizó la semana pasada Mazón a la exsíndica de Cs, Ruth Merino, después de que anunciara su dimisión.

Salidas

Tras la salida de la portavoz en las Cortes de los liberales, el presidente autonómico del PP no tardó en elogiarla, al señalar que es «una gran parlamentaria y amiga». Al mismo tiempo, el alicantino apuntó que las puertas populares «están abiertas permanentemente para los dirigentes de otros partidos y los ciudadanos». Mazón es consciente de que las encuestas están muy apretadas y tiene opciones de arrebatar la Generalitat al Botànic, y no niega que su estrategia pasa por una «operación de suma».

En paralelo, no hay que perder de vista lo que ocurre en Vega Baja, una comarca que será clave y en la que las disputas internas le están pasando factura a Vox. Prueba de ello es que una parte de su militancia ha emigrado hacia la escisión España Suma.

Denuncia en Antifraude por una compra de material sanitario por parte del Consell

El Partido Popular de la Comunidad Valenciana presentó ayer una denuncia ante la Agencia Valenciana Antifraude por un contrato de 45 millones de euros por parte del Consell para la compra de material sanitario chino durante la pandemia que consideran «más que dudoso» y que podría haber generado «sobrecostes millonarios». Ante esta denuncia, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, aseguró que los populares «se dedican permanentemente a destruir» y que «no son un partido que propone ni que tenga una alternativa para la Comunidad Valenciana».

Los diputados populares en las Cortes Fernando Pastor y Miguel Barrachina lamentaron que no haya una comisión de investigación en el Parlamento autonómico porque «PSPV, Compromís y Unides Podem no quieren». Pastor se preguntó que si hay «amigos del Gobierno valenciano» que se hayan beneficiado de los supuestos sobrecostes y señaló que la empresa adjudicataria tenía un capital social de 3.000 euros y nunca había contratado ni volvió a contratar con la Generalitat. También denunció que fue la única de todas las adjudicatarias a la que se le adelantaron los costes de transporte y fletes.

La respuesta por parte del PSPV llegó de la mano del presidente Puig, que señaló que el PP se dedica a difundir «infundios», para lo que «tiene una demostrada capacidad». La del jefe del Consell no fue la única contestación que llegó desde las filas socialistas. Su portavoz de Sanidad en las Cortes, Carmen Martínez, lamentó que «el PP está en contra de que los valencianos tuvieran material de protección» y que «los contratos fueron correctos».