Puig e Illueca guardan las distancias y Unides Podem aprieta con los beneficios de los supermercados

El vicepresidente segundo asegura que el debate es compatible con la «lealtad» institucional y se abre a una negociación con los socialistas tras un acto exprés en el Palau

Héctor Illueca y Ximo Puig durante la presentación del Plan Renhata

Héctor Illueca y Ximo Puig durante la presentación del Plan Renhata / Efe/ M.A. Montesinos

Las diferencias entre Unides Podem y el PSPV alrededor de la figura del empresario Juan Roig y del papel de Mercadona en la cadena de distribución se vuelve cada día más insalvable. Ni una ni otra formación está dispuesta a cambiar de criterio, si bien se ha querido enmarcar el debate dentro de la «lealtad» institucional. De hecho, la crisis a cuenta de la cesta de alimentos ha provocado que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el vicepresidente segundo, Héctor Illueca, mantengan públicamente dos discursos muy diferentes a pesar del paso de los días y, sobre todo, guarden las distancias. Eso sí, la agenda institucional lleva su ritmo y ambos presentaron con dos breves intervenciones una nueva edición del Plan Renhata, en el Palau. Un acto exprés de apenas 20 minutos en el que no hubo ni declaración conjunta. 

Al final el acto, Héctor Illueca abogó por tener un debate «riguroso y sereno» sobre el precio de los alimentos, en el que poder alcanzar «el máximo consenso posible» sobre las medidas a adoptar para hacer frente a este problema. 

«Tenemos puntos de vista distintos, pero lo más importante es que se ha presentado una proposición no de ley en las Cortes Valencianas», señaló a la agencia Efe. El también conseller de Vivienda puso en valor la iniciativa de Unides Podem y se abrió a una confrontación «con total flexibilidad». Esta vez el vicepresidente segundo no citó expresamente a Mercadona, pero mantuvo su apoyo a las medidas de la formación morada como la limitación del precio de los alimentos o gravar los beneficios extraordinarios de las grandes cadenas de distribución alimentaria y grandes supermercados. «Son razonables», concluyó, si bien reconoció que, en este ámbito, es el «Gobierno central el que tiene mayores posibilidades de ponerlo en marcha». 

Inflación vía grandes empresas

Illueca insistió en estudiar qué margen hay en el rango autonómico. «Lo que no puede ser es que los beneficios de las grandes empresas estén provocando una inflación desmesurada que compromete el bienestar de muchas familias».

La respuesta del presidente, Ximo Puig, vino pocas horas después. Durante una entrevista en la COPE, el jefe del Consell consideró que «es evidente que tenemos un problema de precios en la alimentación y en otros ámbitos. Estamos en un proceso inflacionario, pero situar el problema de la inflación en una cadena concreta es totalmente arbitrario». Además, Puig destacó el buen funcionamiento de las cadenas de distribución en nuestro país y glosó la figura de Juan Roig como empresario que aporta lo que le corresponde fiscalmente en la Comunidad Valenciana y suma aportaciones en lo deportivo y cultural. 

El jefe del Ejecutivo calificó de «injusto» el ataque ad hóminem que se está llevando a cabo contra el propietario de Mercadona. Puig instó a trabajar por la vía, por ejemplo, de «fortalecer el papel del productor» y recordó la reciente aprobación de la Ley de la Cadena Alimentaria. 

Lo que hasta ahora son réplicas y contrarréplicas puede acabar en una cuestión de división parlamentaria, pues la apuesta de Unides Podem pasa por que las formaciones políticas se retraten durante la votación en las Cortes. Ya ha logrado el apoyo de Compromís y falta por ver qué hará el grupo socialista. No será la primera vez que voten diferente, pero sí hará más evidente el factor de identidad propia o división.