Rovira, una polémica detrás de otra

El ultimátum de Compromís al conseller, contra el que emprenderá acciones legales el jueves si no cumple con la contratación de profesores, se suma a otras polémicas judiciales y a su marcha de València el día de la dana

El conseller alicantino José Antonio Rovira, en la celebración de una comisión en las Cortes

El conseller alicantino José Antonio Rovira, en la celebración de una comisión en las Cortes / Cortes Valencianas

Borja Campoy

Borja Campoy

Compromís dio este lunes un ultimátum al conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, el alicantino José Antonio Rovira. Si su conselleria no cumple con la sentencia del TSJ, que dictamina aumentar la plantilla de profesores este curso, el jueves emprenderán acciones penales en su contra. Este hecho ha vuelto a poner en el disparadero a Rovira, después de que el pasado jueves se conociera, a través de una denuncia de Compromís en las Cortes, que el día de la dana, el pasado 29 de octubre, abandonó Valencia a las 13.30 horas para regresar a su casa y que un día después, el pasado viernes, recibiera gritos en contra de su gestión durante la protesta que hubo en la Universidad de Alicante para reclamar la dimisión del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón. Estas polémicas recientes se suman al hecho de que la conselleria que dirige haya acumulado, en apenas año y medio, cuatro asuntos que han acabado en los tribunales y a las fuertes críticas que está recibiendo por su gestión en materia cultural.

«Realizaremos acciones penales por el incumplimiento del Consell de una decisión judicial determinada hace cuatro meses», manifestaron este lunes el síndic de Compromís en las Cortes, Joan Baldoví, y el portavoz de Educación de los valencianistas en el parlamento autonómico, Gerard Fullana. «El conseller de Educación tiene abandonada a la comunidad educativa por los efectos de la dana y también está incumpliendo una sentencia del TSJ que le obliga a aumentar todo el profesorado previsto este curso», lamentó Baldoví.

Plazas pendientes

Fullana fue un paso más allá que su portavoz en las Cortes y definió a Rovira como «un prófugo de la justicia», antes de anunciar el ultimátum al conseller: «Si el jueves no se han sacado todas las plazas que faltan para cumplir con los acuerdos de plantillas iniciaremos acciones penales contra los máximos responsables de la Conselleria de Educación». En este contexto cabe recordar que los acuerdos de plantillas fijaban el aumento en 1.900 docentes en las aulas de la Comunidad Valenciana para arrancar el presente curso 24/25. «Rovira se negó y tildó de ilegal el acuerdo. La Justicia lo ha desdicho y le obligó a cumplir el pacto del Botànic en octubre», finalizó Fullana.

Compromís no es la única formación ha puesto en el centro de su crítica a Rovira en las últimas semanas. La gestión del conseller tampoco está pasando desapercibida para el PSPV-PSOE, que también está arremetiendo contra el alicantino es cuestiones como la polémica con los estudios de Medicina en la UA o la contratación de profesores de Secundaria a la que obliga el TSJ. «Si siguen dilatando los tiempos, nos veremos obligados a emprender nuevas acciones para presionar para que se hagan efectivas las adjudicaciones», ha advertido recientemente el diputado autonómico socialista José Luis Lorenz.

El ultimátum de Compromís a Rovira por la contratación de docentes llega apenas cuatro días después de que la propia coalición valencianista destapara el pasado jueves que el conseller abandonó Valencia el día de la dana a las 13.30 horas para regresar a la provincia de Alicante, a una hora en la que ya se estaban inundando municipios valencianos. Fue el propio Fullana el que mostró en la tribuna del parlamento autonómico un documento sobre el uso del coche oficial por parte de Rovira que demostraba que a las 15.30 horas ya estaba en San Vicente del Raspeig. El miembro del Consell lo reconoció. «Tenía cosas que hacer esa tarde en Alicante», dijo durante un pleno en el que también se le afeó el comportamiento mostrado en una sesión anterior, de mediados de diciembre, en la que sus gestos y aspavientos fueron el detonante de una bronca que obligó a realizar una interrupción.

Tensión en el campus

El día después del pleno en las Cortes, el pasado viernes, Rovira acudió junto a Mazón a la toma de posesión de Amparo Navarro como rectora de la UA. Un centenar de personas protestaron contra el presidente de la Generalitat por su controvertida gestión de la dana, llamándolo «asesino» o «culpable». La presencia de Rovira no pasó inadvertida y el conseller también recibió gritos en contra. Posteriormente, en el acto, llamó la atención que fuera de los que más tiempo aplaudió a Navarro tras su discurso, después de las diferencias que mostró con ella en la apertura del curso, en septiembre, y que sea considerado uno de los autores intelectuales del intento de laminar los estudios de Medicina en la institución académica.

La conselleria que dirige Rovira tiene más frentes abiertos. La ley de Libertad Educativa está en el Tribunal Constitucional tras promoverlo Compromís, mientras que la paralización del Plan Edificant también ha sido llevada a los tribunales, en este caso tras una denuncia de los socialistas.

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