Mazón acompaña al Cristo de la Buena Muerte en Alicante

El jefe del Consell se deja ver en la Procesión del Silencio de la capital alicantina, junto al paso que sale desde la Concatedral de San Nicolás y del que fue porteador durante 36 años

Mazón no se pierde la Semana Santa de Alicante.

Mazón no se pierde la Semana Santa de Alicante. / Pilar Cortés

Lydia Ferrándiz

Lydia Ferrándiz

Mazón no se pierde la Semana Santa de Alicante. Ha estado presente en la noche de mayor recogimiento, en la que el silencio se apodera de las calles de la ciudad. Pasadas las 23:30 horas del Jueves Santo, la Hermandad del Cristo de la Buena Muerte iniciaba su marcha desde la Concatedral de San Nicolas, donde de paisano y entre nazarenos y costaleros, se encontraba el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón

Su presencia, aunque anónima a simple vista, no pasó inadvertida para quienes se encontraban en el interior de la Concatedral de San Nicolas. Se le vio junto a su jefe de Gabinete y la diputada Macarena Montesinos. También se le pudo ver en el regreso del paso a la concatedral.

Carlos Mazón continúa perteneciendo a la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Nuestra Señora de las Angustias, aunque en 2024 anunció que se retiraba como costalero tras 36 años llevando el paso. Este 2025 regresó a la salida de la procesión acompañando a su hijo, que este año le tomaba el relevo bajo el paso del Cristo de la Buena Muerte. 

Mazón, de paisano y entre nazarenos y costaleros, acompaña al Cristo de la Buena Muerte en Alicante

Jose Navarro

Hace justo un año, Mazón se despedía públicamente como "cargador" en la Hermandad tras 36 años de pertenencia activa. Lo hizo con un mensaje en redes sociales, acompañado de una fotografía junto al Cristo y su hijo, donde aseguraba que era su "última vez" como hermano cargador. “Lo dejo en tus manos. Su hombro ya queda para ti y para Alicante", decía entonces.

La tranquila aparición de Mazón en la procesión contrasta con los intensos momentos que vivió este jueves por la mañana, cuando, al ser abordado por la prensa a su salida de la Casa de las Brujas, sede de la Generalitat en Alicante, evitó responder a la mayoría de las preguntas de los periodistas sobre su gestión durante la dana del pasado 29 de octubre. Las respuestas que dio, eso sí, no dieron luz sobre las dudas existentes, principalmente respecto a los prolongados silencios entre él y la consellera Pradas durante aquel fatídico día. Tampoco se pronunció respecto a la decisión judicial que descartaba investigar al Gobierno central por lo ocurrido, Mazón se limitó a un escueto "ya hablamos ayer", sin aclarar las contradicciones sobre los registros de llamadas ni el borrado parcial de imágenes del Palau. En medio de este ambiente, su presencia en la procesión del Silencio adquiere un matiz casi simbólico.

Poco antes de esa salida apresurada de la Casa de las Brujas, sede de Presidencia en Alicante, fuentes próximas al presidente de la Generalitat negaron tajantemente que éste fuese a acudir a ningún otro acto ajeno a su agenda pública, tal como ha acostumbrado a hacer estas últimas semanas.

El miércoles, por ejemplo, visitó la localidad de Tàrbena sin aviso previo para anunciar ayudas al pastoreo para la prevención de incendios junto al conseller de Medio Ambiente, Vicente Martínez Mus, quien añadió la visita a su agenda pública después de haberse celebrado.

Otro caso similar, con la falta de convocatoria, se dio en la víspera del Domingo de Ramos, cuando acudió sin informar con anterioridad a un taller de artesanos de palma blanca en Elche. Un día antes, en su vuelta a Alicante, hizo acto de presencia en el colegio La Almadraba, en Playa de San Juan, sin que los medios estuvieron al tanto justo después de que visitara (esta vez con convocatoria pública) el centro Doctor Esquerdo en Sant Joan d’Alacant para anunciar la inversión de la Generalitat en las instalaciones de este hospital infantil y juvenil, donde aseguró que se construiría «la primera ciudad de la salud mental».

Aunque su acto más destacado sin aviso previo fue el que hizo el martes de la semana pasada por la tarde en Alicante, cuando reunió a los principales cargos de su partido (entre ellos todos los consellers excepto Susana Camarero y Marián Cano) en un restaurante habitual del PP para defender los presupuestos acordados con Vox. 

Este Jueves Santo fuera de la agenda pública, Mazón volvió a la Concatedral con su hermandad, la Buena Muerte, tras dar el testigo a su hijo como "portador" de la virgen. Ya el peso de ese paso no lo lleva él.

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