El Ayuntamiento de Torrevieja se vio obligado ayer a suspender las pruebas serológicas que, a través de Ribera Salud (concesionaria de la gestión del Departamento de Salud de Torrevieja), iba a realizar por la tarde a los docentes y al personal educativo de todos los colegios e institutos de la ciudad. El director general de Investigación y Alta Inspección Sanitaria de la Generalitat Valenciana, Javier Santos, remitió a las concejalías de Educación y Sanidad un escrito oficial a las 7:52 horas de la mañana, a través de la sede electrónica, y dirigido al alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón, en el que desautorizaba la realización de las pruebas de seroprevalencia a los 1.100 profesores de los centros escolares de la localidad, que el Ayuntamiento y Ribera Salud tenían programadas a partir de las 15 horas en el Centro Municipal de Ocio (CMO).
El Ayuntamiento dice «acatar» esta decisión de prohibir la realización de los test tras haber consultado con la Asesoría Jurídica del consistorio -dirigida desde julio por el que fuera interventor de la ciudad, Jesús López- que indicó que la administración local podría incurrir en un delito de desobediencia, «algo que, por supuesto, nunca haría el alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón», resaltaron ayer desde el consistorio. En el escrito que ha recibido el Ayuntamiento, la Alta Inspección Sanitaria de la Generalitat desautoriza la realización de las pruebas porque alega que un cribado «es una estrategia de prevención que se determina en función de la evolución de la pandemia y, como tal, siempre es una competencia de autoridad sanitaria» y recuerda que «la estrategia de vigilancia y control de la pandemia de la Covid-19 se ha venido definiendo siempre en el marco de coordinación entre el Ministerio de Sanidad y las diferentes Comunidades Autónomas, razón por la que, en principio, se desautoriza la realización de dichas pruebas en los términos divulgados».
Desafío
La Conselleria de Sanidad, tras haber rechazado realizar test PCR a todos los docentes de la Comunidad Valenciana, se tomó la iniciativa del Ayuntamiento de Torrevieja y de Ribera Salud como un desafío a su gestión. Sin embargo, desde la concesionaria y desde el consistorio defendían que las pruebas las realizaría Ribera Salud como empresa, con su personal y no el de la concesión, fuera del horario laboral de los docentes y sin coste para el Ayuntamiento al hacerlo como parte de su responsabilidad social corporativa. Razones que no le han valido al departamento que dirige Ana Barceló.
El alcalde torrevejense, por su parte, mostró su «indignación» por la forma de actuar de la Generalitat «notificando la prohibición el mismo día en el que se van a hacer las pruebas serológicas (...) y si alguien se siente molesto que se lo agradezcan personalmente a la consellera de Sanidad, al de Educación o al presidente de la Generalitat; Torrevieja no se merece este trato».
Para Eduardo Dolón, «esta lamentable decisión certifica que para el gobierno valenciano la ideología es más importante que la salud de los ciudadanos, los niños y niñas, las familias y los profesores de Torrevieja». Además, añadió, «todavía es más flagrante esta negativa, que demuestra el sectarismo de la Generalitat que preside Ximo Puig, porque en ningún momento su realización iba a suponer gasto alguno a las arcas públicas». Hoy informará de estos extremos en el Consejo Escolar. Dolón ha remitido una carta a la consellera de Sanidad en la que critica la gestión de su departamento por la decisión tomada «y por la forma de tratar a la tercera ciudad de la provincia de Alicante y quinta de la Comunidad Valenciana».
LAS RAZONES QUE ESGRIME LA ALTA INSPECCIÓN SANITARIA
Sanidad, en el escrito enviado al Ayuntamiento de Torrevieja, marca los puntos para justificar la desautorización de realizar test a los docentes. Se basa en la instrucción sobre realización de pruebas diagnósticas para la detección de Covid-19 emitida por el Ministerio de Sanidad el 30 de junio. Así, señala que «la indicación de pruebas diagnósticas (...) deberá ser prescrita por un facultativo», que «las técnicas de detección rápida de antígenos o anticuerpos no se consideran adecuadas para el diagnóstico de infección aguda», que «los cribados que se realizan al margen del cribado poblacional que no cuentan con el suficiente respaldo científico que informe del balance riesgo/beneficio, implican que su impacto en salud sea incierto y las garantías de calidad, cuestionables» y que «no se recomienda la realización de cribados mediante lo realización de PCR o técnicas serológicas por las dificultades de interpretación de los resultados en personas asintomáticas y de bajo riesgo».
