El vicepresidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), Rafael Cantón Moreno, ha señalado que, "en ausencia de tratamientos efectivos probados", el uso del suero de la hermana Paciencia es una "opción" válida para tratar a la auxiliar de enfermería infectada de ébola ingresada en el Hospital Carlos III- La Paz de Madrid.

"La sueroterapia -técnica utilizada desde antiguo antes de la aparición de las vacunas- tienen una efectividad determinada, y es una opción válida en ausencia de otras opciones inmediatas", ha explicado a Europa Press, no sin aclarar que en estos momentos se trabaja "de forma empírica" puesto que no existen evidencias de la efectividad real de ninguno de los tratamientos en desarrollo.

Los riesgos de su administración son bajos siempre que no haya incompatibilidad o efectos secundarios por alergias, "pero esto también se puede minimizar observando la compatibilidad entre el receptor y el donante".

El objetivo es que "el suero actúe aportando las defensas que no ha dado tiempo a que el organismo cree", lo que supone algo más que un tratamiento paliativo, se podría esperar que "proteja" al organismo tal y como lo haría una vacuna, al no haber defensas en el organismo contagiado por ébola.

"Una vacuna despierta el sistema inmunológico de respuesta del individuo frente al agente infeccioso y lo que se hace aquí es poner directamente la respuesta frente a ese agente infeccioso específico", ha explicado.

En cuanto a cómo y durante cuánto tiempo se producirá la administración del suero explica que, como "no hay experiencia", es complicado sacar conclusiones, más sin conocer exactamente el estado de la paciente, aunque "la administración debería ser en función de su respuesta clínica".

Por otro lado, ante la posibilidad de que en próximos días se trabaje con algún agente antivírico en experimentación, como podría ser el favipiravir, según el especialista es otra opción terapéutica que podría utilizarse teniendo en cuenta que se tiene la "ventaja" de que con este fármaco existe una experimentación positiva en un modelo animal.

Hay que analizar el protocolo

El experto ha señalado que, teniendo en cuenta que la auxiliar de enfermería solo ha tenido dos veces contacto con el misionero García Viejo, "hay que estudiar qué pasó estas dos veces". Entiende que es pronto para hacer conjeturas, aunque admite que "uno de los punto críticos" del protocolo de seguridad es la retirada del traje de protección, "ya que hay que extremar las precauciones".

"Lo importante es analizar la situación, qué ha podido ocurrir con los protocolos internacionales que está validados, hay que ver qué problema ha podido haber un análisis epidemiológico ante potenciales casos sospechosos", para así ver "si hay que implementar los protocolos usados hasta ahora".

En su opinión, en estos momentos lo más oportuno sería hacer "una evaluación de los riesgos", para ver qué tipo de contactos se han producido y que se puede hacer para evitar que se produzcan más contagios secundarios.

En cualquier caso, el doctor Cantón Moreno ha recordado que el contagio por ébola no es igual al contagio de la gripe, ya que "no existe trasmisión por aire". Para que se produzca, ha recordado, tiene que haber un contacto directo con la sangre del paciente de "manera íntima", y, por tanto, "por compartir un mismo espacio no debería haber una trasmisión".