Aunque hace ya más de dos años que el coronavirus irrumpió en nuestras vidas como un elefante en una cacharrería y hemos aprendido muchas cosas sobre sus síntomas y efectos, todavía existen muchas dudas sobre lo que debemos y podemos hacer mientras pasamos la enfermedad. Por ejemplo, ¿puedo hacer ejercicio con covid? Toma nota, porque hoy resolvemos esta duda.
Ahora que ya hemos dicho adiós a las mascarillas, la mayoría de las restricciones y las cuarentenas; y que la enfermedad provocada por el coronavirus es mucho más leve, como una gripe o un resfriado. No es raro que mucha gente quiera seguir con sus rutinas habituales mientras pasan el covid y el ejercicio físico es una de ellas.
La variante ómicron cambió las tornas de la pandemia permitiendo, a muchas personas, pasar la enfermedad sin apenas síntomas. Ante esta perspectiva, los profesionales de la medicina tienen claro su consejo sobre si se debe hacer ejercicio con covid: lo mejor es parar y esperar, aunque no se tenga ningún síntoma.
Esta recomendación se explica de forma muy sencilla, aunque nos sintamos bien no debemos olvidar que nuestras defensas están luchando contra el virus y esto, como en cualquier cuadro infeccioso, requiere de hacer reposo.
¿Cuándo puedo volver a hacer ejercicio si tengo covid?
Por lo que aunque no tengamos ningún síntoma de coronavirus, lo mejor para los casos leves es descansar durante por lo menos hasta 10 días después de dar positivo. Y para los casos asintomáticos, los expertos recomiendan reposar durante 7 días tras diagnosticar la enfermedad.
Además, hay que tener en cuenta que el covid persistente es una realidad y debemos permitir a nuestro cuerpo descansar tras la enfermedad y evitar así posibles complicaciones.
Para retomar nuestra rutina diaria y volver a hacer deporte, también es importante tener en cuenta que no es lo mismo si hablamos de una persona joven que suele hacer deporte o de una persona de avanzada edad o con problemas de salud.
Volver a hacer ejercicio después del covid requiere precaución y sentido común, por lo que lo mejor es comenzar con actividades que no supongan sobreesfuerzos (como salir a andar, practicar yoga o realizar estiramientos) y aumentar la intensidad y la duración del ejercicio con el paso de las semanas. Tal y como afirman los expertos, lo más común es que en 3 o 4 semanas hayamos recuperado nuestra forma física previa a la enfermedad.
