Las diferentes etapas y cambios que la mujer pasa a lo largo de su vida pueden tener un efecto directo en su salud bucodental. En la pubertad y edad fértil, el periodo menstrual podría provocar por ejemplo sangrado de encías. El dolor y la sensibilidad son frecuentes durante la menopausia. El Colegio de Dentistas de Alicante ofrece 10 claves para que la mujer pueda cuidar de la mejor manera la salud de su boca y dientes durante toda su vida. 

1.- La ovulación y el periodo menstrual suele provocar que el cuerpo de la mujer presente niveles más altos de la hormona progesterona, lo que podría conllevar que se inflamen las encías e, incluso, que sangren. También pueden producirse llagas. En esos momentos, es muy importante que la mujer siga cepillándonos los dientes a pesar del sangrado de las encías.

2.- El uso de anticonceptivos hormonales pueden provocar sensibilidad en las encías, que pueden sufrir enrojecimiento e inflamación, porque los fármacos pueden hacer que los niveles de estrógeno y progesterona aumenten. La gingivitis es frecuente en el embarazo. Si las molestias son agudas, hay que consultar con el dentista. 

Es esencial prevenir siempre, pero más durante y después del embarazo.

3.- Con el embarazo, es posible que las pastas dentales provoquen náuseas. Es importante mantener una buena higiene bucodental y puede ser de gran ayuda probar otras pastas de sabor neutro. 

4.- La gingivitis es frecuente durante el embarazo por los cambios hormonales, por lo que es importante cuidar y mejorar la salud e higiene con el uso de seda dental o cepillos interproximales para limpiar los espacios entre los dientes. Ante signos de sangrado o inflamación de las encías, acudiremos a nuestro dentista de confianza.

5.- Si se producen náuseas que acaban en vómitos, el esmalte de los dientes puede llegar a dañarse. No es recomendable cepillarse los dientes justo después de vomitar. Es preferible esperar unos minutos.

6.- Es esencial prevenir siempre, pero más durante y después del embarazo y acudir al dentista en las primeras etapas del embarazo, que nos ayudará a proteger nuestra boca en cada etapa del proceso. 

7.- En la gestación es recomendable programar las visitas y realizar todos los tratamientos necesarios para no poner en riesgo nuestra salud ni la de nuestro futuro bebé.

Es preciso cepillarse los dientes tres veces al día, incluida la lengua, así como utilizar cinta dental y cepillos interproximales.

8.- Es clave evitar los alimentos y bebidas dulces durante el embarazo. Una buena salud oral previene los partos prematuros y que el bebé nazca con poco peso. El segundo trimestre de embarazo es el más recomendable para realizar tratamientos dentales. Evitemos compartir cubiertos y vasos con nuestros hijos o hijas, o meternos su chupete en la boca. Podríamos transmitirle bacterias orales.

9.- En la menopausia, si la mujer tiene el nivel de estrógenos muy bajo, podría experimentar dolor y sensibilidad en las encías, caries, úlceras, infecciones o alteraciones dentales. También sensación de boca seca. La cantidad de saliva disminuye en esta nueva etapa. Tras la menopausia, es muy posible sentir nuevos dolores, o sensación de ardor en la boca.

Con el embarazo, es posible que las pastas dentales provoquen náuseas.

10.- Las mujeres que padecen osteoporosis también pueden sufrir fracturas en la mandíbula y esta enfermedad también afectar a sus dientes. Se puede prevenir el deterioro de los huesos llevando hábitos de vida saludables como realizar ejercicio, no fumar, y cuidando la higiene de nuestra boca.

¿Hay algo más que la mujer debe saber?

Solo un último consejo. Acudir regularmente a nuestro dentista de confianza. No hay que olvidar que los cambios hormonales implican una especial atención odontológica. Hay que alimentarse de forma saludable, evitando el tabaco y el alcohol. Es preciso cepillarse los dientes tres veces al día, incluida la lengua, así como utilizar cinta dental y cepillos interproximales.