La vacuna, que ofrece a las mujeres una protección eficaz para los cuatro tipos de virus (6, 11, 16 y 18); responsables de la mayor parte de las enfermedades asociadas al VPH, está indicada para inmunizar a niñas y adolescentes de entre 9 y 15 años y para mujeres adultas de entre 16 y 26 años. La vacuna es preventiva, por tanto no representa un tratamiento contra el cáncer y su efectividad se ha demostrado sobre todo en mujeres que no han estado expuestas a ninguno de los tipos de VPH, por este motivo se recomienda vacunar a las niñas antes de su primera relación sexual. No obstante, si la mujer ha estado expuesta a alguno de los cuatro tipos de virus la vacuna la protegerá de aquel que no la haya infectado.

La cuestión que por el momento se ignora es durante cuánto tiempo es eficaz la vacuna. Al respecto, el jefe del servicio de Epidemiología y Registro del Cáncer del Instituto Catalá d'Oncologia (ICO);, Francesc Xabier Bosh, afirmó que "la expectativa es que va ser de larga duración", pero por el momento desconoce si su efectividad superará los seis o siete años que lleva el estudio. En cualquier caso, advirtió que "no hay ninguna señal que nos permita anticipar que la vacuna va a necesitar una dosis de recuerdo más adelante", y explicó que "los estudios siguen en marcha y el seguimiento de estas mujeres va a continuar en los próximos años", por tanto una respuesta definitiva sobre la duración de esta protección se sabrá en el futuro.

Por este motivo, advirtió a las mujeres que decidan realizar el tratamiento que deben seguir con el protocolo de cribado ya que "la vacuna al ser preventiva, no resuelve las situación en las que ya hay un proceso neoplásico en marcha, en cualquiera de sus estadios" y, aunque cubre aproximadamente un 75 por ciento de las infecciones que desarrolla el PVH, "existe un 25 ó 30 por ciento que corresponde a otros tipos de papiloma que no están incluidos y para este grupo las mujeres debemos mantener alguna forma de prevención secundaria", por lo que recomendó la visita regulares al ginecólogo.

INCLUSIÓN EN EL SNS.

La forma de administración consiste en tres dosis separadas de 0.5 miligramos en una inyección intramuscular, que podrá ser en la parte superior del brazo o en la zona anteólateral superior del muslo, que se suministrarán en régimen de vacunación alternativa durante máximo un año, lo que significa que tras la primera inyección deberán pasar al menos un mes y la tercera al menos tres meses después de la segunda dosis. El coste en el mercado será de 154,86 euros por dosis, lo que significa que el precio total del tratamiento (tras dosis); será de 464,58 euros.

En estos momento se está estudiando su incorporación en el calendario vacunal del Sistema Nacional de Salud (SNS);, y en cualquier caso únicamente se dará cobertura a niñas entre los 11 y 14 años, aunque se tiene la "esperanza", según señaló el catedrático de medicina preventiva y salud publica de la facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Juan Carlos, Ángel Gil, de que se amplíe hasta los 26 años.

En cuanto al coste que supondrá su incorporación al SNS, explicó que, aunque es difícil de cuantificar su coste, su implantación sería inferior a los costes que ocasionan las enfermedades que desarrolla el PVH como son la hospitalización, tratamientos, medicación, visitas médicas etc. Según su estimación, si actualmente existen aproximadamente 200.000 niñas de 11 años en España y coste fuera para las CCAA de 100 euros la dosis, el coste anual sería de 60 millones de euros. "Naturalmente su efecto económico no se verá de manera inmediata pero a largo plazo se van a reducir los costes sanitario", añadió.

CADA 18 MINUTOS MUERE UNA MUJER EN EUROPA.

La aprobación de la vacuna se basó en un estudio realizado a más 20.000 mujeres de 33 países, a mujeres comprendidas entre las edades recomendadas en el tratamiento, y los extensos estudios clínicos realizados han demostrado que la vacuna proporciona una fuerte memoria inmunitaria en las mujeres vacunadas y una eficacia del 100 por cien en la prevención de lesiones cervicales precancerosas, en lesiones de bajo grado y en la prevención de verrugas genitales. Teniendo en cuenta los datos del ensayo, por cada 170 niñas vacunadas se evitará un caso de cáncer útero, lo que significa reducir las cifras actuales de manera "importante", señaló Gil.

Actualmente, el 70 por ciento de las personas sexualmente activas podrían estar expuestas a los papilomasvirus en algún momento de su vida, existen más de cien tipos de virus descritos, de los que al menos 15 están considerados de alto riesgo para desarrollar cáncer de cuellos de útero. Los tipos 16 y 18 son los responsables del 70 por ciento de estos tipos de cáncer, y el 6 y 11 causan el 90 por ciento de las verrugas genitales.

En el mundo se diagnostican anualmente más de medio millón de casos de cáncer de cuello de útero y se estima que al año unas 280.000 mujeres mueren; en Europa al menos se diagnostican 60.000 casos y cada 18 minutos muere una mujer por cáncer de cérvix, lo que significan 30.000 fallecimientos; y en España se detectan 2.100 nuevos casos y provoca 740 fallecimientos. Según los datos de la Organización Mundial de Salud (OMS);, este tipo de cáncer es el segundo más frecuente entre las mujeres de entre 15 y 44 años, sólo por detrás del de cáncer de mama.