En un año marcado por el ‘milagro’ de las vacunas contra el covid-19, toda buena noticia sobre este tipo de fármacos es bien recibida. Este mismo miércoles, de hecho, la revista 'Nature' recoge una buena nueva sobre uno de los pinchazos más buscados por el mundo: la vacuna contra la malaria. Dos ensayos clínicos apuntan a que la combinación de una fórmula experimental y un fármaco profiláctico podría brindar una protección completa y duradera frente a esta enfermedad infecciosa que, solo en 2019, infectó a más de 200 millones de personas en todo el mundo y mató a más de 400.000 ciudadanos.

Este tratamiento, todavía en la primera fase de los ensayos clínicos, se ha asociado con una eficacia de casi el 90%. Su funcionamiento es el siguiente. Se inocula una versión químicamente atenuada (e inocua) de las 'esporas' del parásito que causa la malaria y, unos días más tarde, se administra un tratamiento profiláctico contra los estadios larvales de la infección. El estudio ha testado tanto la eficacia de la pirimetamina como de la cloroquina (el antipalúdico que hace tan solo unos meses se estudió como tratamiento experimental contra el covid-19 con escaso resultado).

La combinación de estos fármacos con el pinchazo, testada en un grupo de 56 voluntarios sanos residentes en Estados Unidos, parece efectiva contra varias cepas del parásito. Incluido el linaje que predomina en Brasil. Los científicos interpretan estos resultados como "prometedores" y apuestan, una vez más, por tirar adelante este tipo de estudios. Actualmente no existe ninguna vacuna aprobada contra la malaria. Solo existe una fórmula que, tras lograr unos buenos resultados en fase clínica, ha pasado a una fase de "pruebas piloto" en África.

Búsqueda de una vacuna segura, efectiva y asequible

"La malaria se ha mantenido durante mucho tiempo entre las peores amenazas para la salud humana", resumen los científicos Nana Minkah y Stefan Kappe en un artículo adjunto al estudio clínico publicado este miércoles. Los expertos, del Centro Global de Enfermedades Infecciosas de Washington, reclaman seguir investigando todas las fórmulas disponibles hasta dar con una solución eficaz y duradera. "Se necesitan con urgencia vacunas eficaces contra el paludismo", destacan.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) muestra que, hoy por hoy, África es la región más afectada por esta enfermedad infecciosa transmitida por mosquitos. En 2019, el continente sufrió un 94% de los casos y las defunciones globales por paludismo. La mayoría de estos, agrupados en tan solo seis países (Nigeria, República Democrática del Congo, Tanzania, Burkina Faso, Mozambique y Níger). El colectivo más afectado por los contagios de esta enfermedad son los menores de cinco años. El 67% de las muertes globales por esta enfermedad se concentran entre los más pequeños. 

Hasta ahora, la gran mayoría de esfuerzos para luchar contra esta enfermedad se ha destinado a tratar a los pacientes enfermos y a intentar erradicar los focos de mosquitos. El último informe sobre la cuestión suma casi 3.000 millones de dólares invertidos en un año para el control de esta enfermedad. Pero, según apuntan los expertos, el camino para erradicar esta enfermedad pasa por conseguir una vacuna segura, eficaz y asequible. Solo entonces podremos dar por controlada esta plaga.