La periodista vizcaína Olatz Vázquez ha muerto esta madrugada en su casa, a los 27 años, debido al cáncer gástrico que le fue diagnosticado en junio de 2020, según informa la 'Cadena Ser'.

A lo largo de estos meses, Vázquez denunció en medios de comunicación y redes sociales ser una víctima colateral de la pandemia de covid-19: el estado de alarma del año pasado retrasó unos meses la endoscopia en la que le diagnosticaron, más tarde de lo que tocaba, un tumor maligno en el estómago. Pero hasta antes de la pandemia, la joven había estado casi un año sometiéndose a pruebas en que los médicos no lograron dar con su enfermedad.

"Por la pandemia se han diagnosticado un 21% menos de casos de cáncer [en relación a la etapa del confinamiento domiciliario]: la gente no fue a los hospitales, se retrasaron pruebas. Se avecina una pandemia de cáncer avanzado, se han olvidado de nosotros", explicaba la joven, hace solo dos meses, en una entrevista con El Periódico.

Vázquez, que en sus últimos meses fue tratada en el Hospital Vall d'Hebron (Barcelona), periodista y fotógrafa de formación, se hizo conocida en Twitter contando su historia. El músico James Rhodes le regaló una cámara de fotos Leica que utilizó la retratar los efectos del cáncer, como la pérdida de pelo o de peso.

La última vez que escribió en sus redes sociales, Twitter e Instagram, fue el pasado 19 de agosto. Explicaba que estaba pasando por "semanas muy, muy, muy difíciles" en las que había estado ingresada un mes entero. "He perdido la noción del tiempo, si es que ahí dentro la tienes. He perdido kilos, aspecto, independencia. Siento deciros que he perdido a la Olatz que era", escribía la joven. "Me he convertido en una persona totalmente dependiente de los míos, ya que vivo 24/7 conectada a alimentación parententeal y una vía nasogástrica".

En ese momento se encontraba hospitalizada en su propia casa, en Sopela (Vizcaya), y ya no estaba en tratamiento, después que el experimental que le administraron en Vall d'Hebron no fuera suficiente.

Su proyecto fotográfico 'Minbizia' (cáncer en euskera: 'min' es daño y 'bizia', agudo) aglutina autorretratos de ella misma en blanco y negro. 'Minbizia' fue seleccionado para el Festival Internacional de Fotografía de Belgrado.