Este jueves el portaavione'Queen Elizabeth' preside la bahía de Palma. El gran buque de guerra de la flota británica ha llegado a aguas palmesanas hacia las 10 de la mañana. A esta hora, pese a la gran cortina de agua causada por las intensas lluvias, era posible divisar su imponente silueta.

Tal y como ha podido saber este diario, el 'HMS Queen Elizabeth', que transporta 18 aviones de combate Lockheed Martin F-35 Lightning II, fondeará durante cuatro o cinco días en el puerto de Palma para el descanso de su tripulación.

El pasado mes de octubre, el portaaviones realizó ejercicios navales con barcos y aviones de la Armada de Estados Unidos, la Armada Real de Australia y la Fuerza de Autodefensa Marítima Japonesa en la bahía de Bengala.

Este buque de 70 metros de altura y 280 de largo ha navegado por la región del Indo-Pacífico, en una travesía de 48.000 kilómetros visitando cerca de 40 países. Uno de sus cometidos en esta travesía es reforzar las relaciones diplomáticas británicas en la región, explicó el gobierno británico.

Este coloso de los mares, que según el Ministerio de Defensa alcanzará la capacidad operativa total en diciembre de 2023, tiene su base en Portsmouth, lidera el Grupo de Combate 21 de Reino Unidos y se ha convertido en el orgullo nacional.

Cinco gimnasios, una capilla y un centro médico

El 'HMS Queen Elizabeth', que ha reemplazado al 'HMS Ocean', es el buque más grande jamás construido para la Royal Navy y cuenta con cinco gimnasios, una capilla y un centro médico. Desplaza 65.000 toneladas y presenta una eslora de 280 metros y una manga de 73 metros, espacio suficiente para tres campos de fútbol. Es capaz de transportar hasta 1.600 efectivos y 40 aeronaves, pudiendo alcanzar una velocidad máxima de 25 nudos y una autonomía de 10.000 millas náuticas, unos 19.000 kilómetros.

La cubierta de vuelo del buque tiene cuatro pistas enormes que se utilizan para lanzar el avión rápido F35 Joint Strike Fighter.