Vomitivo se queda corto: así es el aseo más repugnante del mundo

Un bloguero británico ha viajado por 91 países en busca de los retretes más asquerosos y ha elegido al ganador

Graham Askey junto a la portada de su libro y la imagen del "trono" más repugnante del mundo

Graham Askey junto a la portada de su libro y la imagen del "trono" más repugnante del mundo

Mati Sirvent

Mati Sirvent

Hay quien tiene aficiones raras y luego está Graham Askey, un bloguero británico de 58 años al que sus amigos han bautizado sarcásticamente como "el rey de la porcelana". Y es que su afición no es coleccionar figuritas de Lladró sino explorar el mundo en busca de los retretes de uso público más sucios y repugnantes. Este constructor jubilado descubrió su pasión después de sus primeras vacaciones en el extranjero en Marruecos.

Mientras unos sueñan con disfrutar de su tiempo libre en una isla paradisiaca, desde entonces este hombre se ha gastado más de 175.000 euros en viajes a 91 países en busca del peor baño público del mundo. Su ardua tarea ha concluido y tras visitar cientos de excusados en todos los continentes ya tiene un "trono" vencedor.

El que denomina como el "agujero infernal perfecto" se encuentra en Tayikistán, un país de Asia central que limita con Afganistán al sur, Uzbekistán al oeste, Kirguistán al norte, y la República Popular China al este.

El escritor de viajes ha concedido el escalón más alto del podio a una carpa destartalada que sirve como baño en la región de Ayni, al norte de Tayikistán. En su gráfica descripción de este conato de inodoro destaca que es tan hediondo que aquellos que están "lo suficientemente desesperados" como para usarlo deben "agacharse sobre heces secadas al sol". Sin embargo, para él "lo más repelente de todo" es que las "paredes" de tela de ese sucedáneo de aseo se usan como papel higiénico ¡compartido!

Otro de los inodoros más insalubres de su lista

Otro de los inodoros más insalubres de su lista / Graham Askey

En su detallada reseña sobre el más vomitivo de los muchos servicios públicos que ha visitado, Askey añade que trozos de la citada "pared" han sido arrancadas y tiradas al suelo del infecto cubículo. Por si fuera poco, no solo es insalubre hasta niveles extremos: también es peligroso, ya que usarlo conlleva el riesgo de molestar a las serpientes venenosas y las ratas de gran tamaño que tienen su guarida en las rocas que circundan la letrina.

Su esfuerzo se ha plasmado en el libro "Toilets of the Wild Frontier", que está a la venta en Amazon y donde ha recopilado los 36 peores aseos que se encontró en sus "viajes de mierda".

En su ranking figuran otros "sanitarios" como un fregadero de Bangladesh y un baño atascado en China que acumula litros de heces y orines. Su lista recoge también uno en altura al que se accede mediante una pasarela que "desafía a la muerte", y otro en Benin colocado en una silla de madera sobre una plataforma elevada en mitad del pueblo. Es el "baño menos consciente de la privacidad" que jamás haya encontrado el intrépido autor y el que ha usado para ilustrar la portada de su libro.

"Asquerosos más allá de las palabras"

El aseo de Bangladesh

El aseo de Bangladesh / Graham Askey

Graham Askey fotografió todos y cada uno de estos lugares pero ha ahorrado a los lectores las imágenes del interior: "No se equivoquen, cada 'entrada' en mi lista es asquerosa más allá de las palabras. Algunos pueden verse bien, pero créanme, y lo sé, son los lugares más inhóspitos de la Tierra, y pasar un solo minuto dentro de cualquiera de ellos sería impensable, excepto en las peores circunstancias".

Respecto a su elegido como número uno de los váteres más infectos del planeta, el escritor relata que "después de mis muchos viajes, pensé que lo había visto todo, con cagaderos sobre pilotes, lavabos aparentemente llenos de orina y bañeras utilizadas como pantanos improvisados. Pero después de haber disfrutado de algunos de los baños más sucios que se pueden encontrar en cualquier parte del planeta, el inodoro en Tayikistán tiene que ser el peor del mundo: es el infierno perfecto".