El Comité Noruego del Nobel, con sede en Oslo, ha anunciado este viernes los ganadores del Premio Nobel de la Paz 2022. En esta edición, marcada por la guerra en Ucrania que el Kremlin inició el pasado 24 de agosto, ha reconocido la defensa por los derechos humanos en RusiaBielorrusia y Ucrania.

Según ha destacado Berit Reiss-Andersen, presidenta del comité, este año se ha querido "honrar a tres destacados campeones de los derechos humanos, la democracia y la convivencia pacífica": el activista bielorruso Ales Bialiatski, la oenegé rusa Memorial y el Centro para las Libertades Civiles de Ucrania. "Con sus constantes esfuerzos a favor de los valores humanistas, el antimilitarismo y los principios del derecho, los ganadores de este año han revitalizado y honrado la visión de paz y fraternidad entre las naciones de Alfred Nobel, una visión muy necesaria en el mundo de hoy", ha agregado.

Estos son los tres galardonados:

Ales Bialiatski

Ales Bialiatski (1962) es un activista bielorruso que fundó en 1996 el Centro de Derechos Humanos Viasna (primavera, en bielorruso), con sede en Minsk y oficinas regionales en las principales ciudades del país, para dar respuesta a las personas encarceladas por motivos políticos. Según ha destacado el Comité Noruego del Nobel, fue uno de los impulsores del "movimiento democrático que surgió en Bielorrusia a mediados de la década de 1980". "Ha dedicado toda su vida a promover la democracia y el desarrollo pacífico en su país de origen", ha añadido. En Bielorrusia, gobierna con mano de hierro Aleksándr Lukashenko desde el año 1994

Como resultado de su activismo, Bialiatski se encuentra en prisión a la espera de juicio y el Gobierno de Lukashenko trata de impedir su trabajo y el de su organización.

Durante la revuelta de 2020 tras las fraudulentas elecciones presidenciales, en las que el presidente obtuvo un dudoso 79,7% de los votos, Viasna se ocupó de defender a las personas detenidas en las protestas y documentó las violaciones de derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad bielorrusas.

Memorial

Fundada en 1989, la oenegé rusa Memorial fue creada por activistas de derechos humanos de la antigua Unión Soviética para asegurarse de que las víctimas de la opresión del régimen comunista nunca fueran olvidadas. Durante su actividad en todos estos años, se ha encargado de recopilar y verificar información sobre abusos y crímenes de guerra perpetrados contra la población por las fuerzas rusas y prorrusas y monitoriza la situación de los derechos humanos en "puntos calientes" como CrimeaOsetia del Norte y Chechenia.

Según ha recordado el Comité del Nobel, "en 2009, la jefa de la sucursal de Memorial en Chechenia, Natalia Estemirova, fue asesinada a causa de este trabajo". Asimismo, las oficinas de esta organización han sido víctimas de ataques.

Centro para las Libertades Civiles

El Centro para las Libertades Civiles de Ucrania se fundó en 2007 con el propósito de promover los derechos humanos, la democracia y la solidaridad en el país eslavo. Durante las protestas del Euromaidán de 2013, documentó las violaciones de derechos humanos y facilitó asistencia legal a los represaliados. "Ha tomado una posición para fortalecer la sociedad civil ucraniana y presionar a las autoridades para hacer de Ucrania una democracia de pleno derecho", ha constatado el Comité del Nobel.

En la actual invasión rusa, el Centro se encarga de recoger testimonios sobre crímenes de guerra cometidos por las tropas rusas y desempeña un "papel pionero" para hacer "rendir cuentas a los culpables".