Se llamaban Arsen y Tigran, tenían 16 y 21 años, respectivamente, y su "pecado" era que se amaban. Son dos nuevas víctimas de la homofobia, culpable de que se hayan arrojado desde un puente en Ereván, la capital de Armenia, hartos del acoso, insultos y persecución al que eran sometidos en su país por ser homosexuales.

Su nota de despedida antes de saltar al vacío desde el puente Davtashen, un viaducto sobre el río Hrazdan, de 92 metros de altura, ha sido una foto en Instagram de su último beso, con este mensaje: "Final feliz. La decisión de compartir estas fotos y todas nuestras acciones fueron hechas por ambos".

Presión social contra los homosexuales

El colectivo Pink Armenia ha denunciado con este caso, ocurrido hace cuatro días, la presión social que existe en su país contra el colectivo LGTBI, recordando además que en otros 11 estados la homosexualidad sigue siendo penada con la muerte.

En un comunicado publicado tras el trágico suicidio de estos jóvenes, la asociación ha manifestado que la muerte de esta joven pareja "prueba una vez más que las personas LGBT en Armenia no están seguras ni protegidas por la sociedad o el Estado".

Una de las últimas fotos publicadas en Instagram por la pareja

Por ello, esta agrupación ha hecho un llamamiento público para que la población "se abstenga de insultos, expresiones humillantes y de distorsionar los detalles del incidente en forma de mensajes y comentarios para difundir el odio".

A pesar del apoyo de sus familias, los jóvenes que se han quitado la vida sufrían problemas mentales a consecuencia de la discriminación que sentían. "Buscar servicios de salud mental sigue siendo un tabú en la sociedad armenia", puntualiza Pink Armenia.

La homofobia en Armenia: "Hay gente pidiendo que otros hagan lo mismo"

"Desafortunadamente, no fue sorprendente ver la reacción de la gente ante lo sucedido. Las fotos que los chicos publicaron rápidamente se difundieron en las redes sociales y los canales de Telegram con expresiones de odio e insultos, que en su mayoría continúan enfatizando el hecho de que los chicos eran homosexuales y esa circunstancia justifica su decisión de quitarse la vida. Muchos comentarios incluso pidieron que otros hicieran lo mismo", denuncia la asociación.

"Consideramos inaceptable justificar la muerte de personas. Los pensamientos suicidas a menudo van acompañados de sentimientos de culpa, miedo, autoinculpación y vergüenza debido a las actitudes de la sociedad hacia la orientación sexual y la identidad de género", subrayan desde esta organización.

  • Teléfono para la prevención del suicidio 024
  • Teléfono de la Esperanza: 717 003 717
  • Fundación Española para la Prevención del Suicidio: www.prevensuic.org
  • Fundación Anar, Ayuda a niños y adolescentes en riesgo. www.anar.org / 900 20 20 10