En su invariable e incesante travesía alrededor del Sol, la Tierra cruza áreas de su órbita repletas de partículas y rocas de hielo y polvo que han abandonado en su camino los cometas que viajan por el sistema solar. Estos fragmentos chocan contra la atmósfera alcanzan, debido a la fricción del aire, temperaturas de hasta 6.000 grados y arden en su camino por el cielo.

A este fenómeno, que pinta una estela de luz y fuego en el firmamento y se desintegra en pocos segundos, le llamamos "estrella fugaz" y es uno de los eventos astronómicos más hermosos de presenciar. Por suerte, tenemos varias oportunidades de hacerlo a lo largo del año gracias a las "lluvias de estrellas". Se trata de momentos en los que la Tierra atraviesa nubes de partículas especialmente densas, por lo que se pueden ver espectáculos astronómico de varios meteoros por hora.

Estas son las lluvias de estrellas de noviembre

El mes de noviembre destaca por ser especialmente abundante de lluvias de estrellas. En concreto, tenemos dos lluvias de estrellas en noviembre relativamente intensas: las Leónidas y las Táuridas.

Las Leónidas, una de las lluvias de estrellas más activas del año

Las noches de más actividad de la lluvia de estrellas de las Leónidas, si las condiciones son ideales y escapamos de la contaminación lumínica y de la interferencia lunar, podemos llegar a observar hasta 15 meteoros o estrellas fugaces por hora.

Este año no será el más idóneo para observar las Leónidas, ya que esta lluvia de estrellas de noviembre, considerada una de las más activas del año, que tendrá lugar la noche del 17 al 18 de noviembre (aunque están activas del 6 al 30 de noviembre), coincide con el último cuarto lunar y solo será visible de madrugada, en las últimas horas de la noche.

Las Leónidas, una de las lluvias de estrellas de noviembre INFORMACIÓN

Por lo que, las horas antes del amanecer serán el mejor instante para observar la lluvia de estrellas de las Leónidas, aunque la cantidad de estrellas fugaces o meteoros será inferior a lo habitual. Las Leónidas aparentan provenir de la constelación de Leo (de ahí su nombre) pero pueden observarse en cualquier parte del cielo nocturno.

Un consejo, si quieres ver las Leónidas, lo más recomendable es que acudas al lugar donde realizarás la observación 30 minutos antes de empezar. Así tus ojos se habrán acostumbrado durante el tiempo suficiente a la oscuridad para que la observación del evento astronómico sea perfecta.

Las Táuridas, otra oportunidad para ver estrellas fugaces

La otra lluvia de estrellas de noviembre, aunque está considerada un evento astronómico menor, son las Táuridas. Se trata de una lluvia de estrellas que se produce a principios de noviembre en la que podemos observar hasta 5 estrellas fugaces por hora, si las condiciones de observación son las ideales.

Este año el pico de actividad de las Táuridas tendrá lugar solo tres días después de que la Luna entre en su fase de luna llena, la noche del 11 al 12 de noviembre. Por lo que, debido a la luz de la Luna, esta lluvia de estrellas de noviembre será prácticamente inapreciable. Aunque, con paciencia, quizá podrías tener un golpe de suerte y ver algún meteoro.

Debes saber que, generalmente, una de las características principales de las Táuridas es su brillo y su facilidad de observación. Estas bolas de fuego que atraviesan el firmamento a más de 100.000 km por hora, son restos del paso del Cometa Encke.

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Cómo observar una lluvia de estrellas correctamente

  1. Busca un lugar oscuro: Los mejores lugares para observar cualquier lluvia de estrellas son los que están más alejados de las ciudades.
  2. Ponte cómodo: Encuentra una posición que te permita observar la mayor parte del cielo. Si puede ser, hazlo tumbado boca arriba para no forzar el cuello.
  3. Permite que tus ojos se acostumbren a la oscuridad: Lo más probable es que a lo largo de tu primera media hora de observación, no veas absolutamente nada. Dale unos 30 minutos a tus ojos para acostumbrarse.