El contexto actual, en el que los precios no dejan de subir, obliga a los usuarios a buscar alternativas para ahorrar en la factura de la luz. Y es justamente aquí donde entra en escena la generación distribuida, la cual funciona gracias a la instalación de placas solares. Este tipo de electrificación persigue el objetivo de cambiar un modelo de consumo energético basado en el uso de combustibles fósiles, en el que el consumidor juega un papel pasivo, por uno en el que la energía limpia es la protagonista, donde los usuarios son productores a la vez que consumidores.

España vive un cambio de paradigma, situación que queda en manifiesto tras analizar los datos de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF). En este sentido, estipula que en en 2021 se instalaron en el país 1.203 MWn de instalaciones fotovoltaicas. Es así que el crecimiento respecto al año 2020 fue de más del 100%, por lo que queda en evidencia que la energía solar es el futuro.

La energía solar se perfila como una de las mejorar alternativas a las tradicionales.

Sin embargo, siempre que hablamos de autoconsumo de energía eléctrica se hace pensando en los domicilio habituales y se deja de lado las segundas residencias. En este artículos queremos explicarte si es rentable instalar placas solares en ellas y qué beneficios puedes obtener.

Aprovecha todo el potencial de tu tejado con la generación distribuida

España es, por excelencia, uno de los países con mayores horas de luz al año, unas 2.500 anuales. Esto significa una fuente de energía inagotable y limpia, por lo que la transición energética puede convertirse en una alternativa altamente posible y eficaz. Gracias a esta situación privilegiada del país, Holaluz impulsó la filosofía de "La Revolución de los Tejados", con el objetivo de transformar cada metro cuadrado de tejado en energía 100% renovable.

Con 10 millones de tejados transformados se podrá pasar de un 40% de energía renovable actual al 80%, un cambio que reducirá las emisiones de CO₂ en un 60%

Holaluz, a través de la instalación de tantas placas solares como permita tu tejado, propone un modelo de generación distribuida en que las personas, además de consumir energía, sean productoras y vendedoras. De esta manera, dar origen a un sistema disruptivo que democratiza la gestión de la energía, desarrolle un modelo basado en las fuentes de energía renovables y reduzca los precios, a la vez que garantice la independencia energética del sistema.

Instalar placas solares, además de contribuir al medio ambiente, ayudará a tu economía.

5 beneficios de instalar paneles solares en una segunda residencia

Instalar placas solares en una segunda residencia cuenta con numerosas ventajas, por lo que pasaremos a detallar 5 de ellas a continuación.

  1. Ahorro en la factura de la luz: los usuarios que tienen placas solares en su vivienda consiguen un ahorro de entre 40 y 60%anualmente.
  2. Mayor potencia: Gracias a una instalación de autoconsumo, se puede conseguir una mayor potencia al añadirla a la ya contratada. De esta manera, se puede mantener el precio y, al mismo tiempo, tener la potencia que necesitamos.
  3. Incremento del valor de la segunda residencia: La eficiencia energética cuenta cada vez más a la hora de adquirir un inmueble. En este sentido, una vivienda con una instalación fotovoltaica puede ver incrementado su precio, por lo que se trata de una inversión que supone un ahorro a largo plazo. 
  4. Beneficios fiscales: Numerosos municipios son los que ofrecen una rebaja del IBI por tener una instalación fotovoltaica de energía eléctrica. Además, hay ayudas contempladas por los Next Generation, subvenciones en la instalación y hasta un 60% de deducciones sobre el IRPF.
  5. Poco mantenimiento: Las placas solares tienen una vida útil de entre 25 y 30 años, y el único tipo de mantenimiento que requieren es una limpieza 3 o 4 veces al año.

A todo ello hay que sumarle la posibilidad de vender los excedentes y, además, la posibilidad de ahorrar también en la factura de la luz del domicilio habitual, puesto que compañías como Holaluz permiten compensarla con el excedente generado en cualquier vivienda del usuario.

Gracias a las placas solares, puedes obtener mayor potencia y un ahorro considerable en tu factura de la luz.

Descubre cómo compensar los excedentes generados por las placas solares

El autoconsumo colectivo se reguló en España con el Real Decreto 244/2019. Con la actual legislación se contemplan tres modalidades con diferentes formas de compensar los excedentes que generan las instalaciones fotovoltaicas colectivas.

Ahora puedes compensar el consumo de tu domicilio habitual instalando placas solares en una segunda residencia, y viceversa

Con el primero de los modelos, el de Autoconsumo colectivo sin+ excedentes, se instala un dispositivo antivertido para evitar que la energía sobrante se vaya a la red de transporte y distribución. En el caso de las dos modalidades con excedentes, existen dos fórmulas: 

  • Autoconsumo colectivo con excedentes no acogidos a compensación. Los titulares de la instalación fotovoltaica venden los excedentes al mercado eléctrico como productores.
  • Autoconsumo colectivo con excedentes acogidos a compensación. En este caso, y a través de la comercializadora contratada, los excedentes se inyectan a la red y los titulares de la instalación fotovoltaica reciben una compensación en su factura de la luz.

Holaluz ofrece una cuota de ahorro fijo garantizada del 70% en sus contratos que, incluso, puede llegar al 100%. La compañía paga los excedentes generados por las instalaciones fotovoltaicas a 0,10 € el kWh, un precio por encima del mercado, y en el caso de sobrar ahorro, los clientes pueden cobrarlo en uno o dos pagos de 300 €.

Pero la compañía va más allá. Ahora ofrece la posibilidad de reducir la factura de la luz de un domicilio con el ahorro generado por la instalación fotovoltaica de otra propiedad. Es decir, si por ejemplo cuentas con una segunda residencia donde puedes instalar placas solares y en tu domicilio habitual no, puedes compensar con ese ahorro la factura del segundo. Un mecanismo que también funciona a la inversa. En resumen, puedes dejar la factura de un domicilio a cero y reducir el total de las facturas de otras propiedades.