Las tiendas de mascotas de Alicante prevén cierres por la nueva Ley de Bienestar Animal: "Es un desastre"

La norma estatal busca limitar las mascotas y prohibir la comercialización de animales como el periquito o el conejo por estar protegidos o por dañar el medioambiente

Una persona acaricia a un conejo

Una persona acaricia a un conejo / INFORMACIÓN

Lydia Ferrándiz

Lydia Ferrándiz

Un futuro incierto planea estos días sobre los responsables de las tiendas de animales de la provincia. El motivo, la nueva Ley de Protección y Derechos de los animales que tiene prevista de aprobación el Gobierno y que prohibiría la venta de algunos animales, pero también la tenencia en los hogares.

Un listado aún provisional marcará qué animales se pueden tener en los hogares y cuáles no. De momento, el objetivo de la norma estatal es controlar qué mascotas hay en la actualidad y establecía que no se podrían vender aves como cotorras, Agapornis, ninfas o mirlos. Ni pequeños roedores como cobayas, chinchillas, ratones o conejos. Tampoco tortugas y, por supuesto, ni reptiles exóticos ni arañas ni invertebrados similares.  

El anteproyecto de ley marca un máximo de 48 meses desde la entrada en vigor de la ley para elaborar ese listado. Pero mientras tanto y ante la incertidumbre, el sector se revuelve. No será un listado de máximos sino de mínimos ya que no será de animales prohibido, sino de animales permitidos. Por ejemplo, se podrán seguir adquiriendo perros y gatos, pero solo a través de criadores registrados.

Imagen de unos periquitos apoyados en una barra

Imagen de unos periquitos apoyados en una barra / INFORMACIÓN

En la provincia hay aproximadamente unos 95 establecimientos dedicados a este sector, entre tiendas y servicios veterinarios a pie de calle, según los últimos datos estimados de Facpyme, que ven su final con la aprobación de una normativa que nació con la firme intención de erradicar el maltrato. Desde las tiendas de animales de Alicante señalan que "si la ley sale adelante será un desastre" ya que "si no se puede vender el que tiene tampoco criará y no se comprarán alimento ni jaulas".

Soledad de la Hoz, responsable de Piensos Félix en Denia, asegura que esto también supondrá "el cierre de los pequeños comercios". "Las grandes tiendas hace mucho tiempo que dejaron de tener animales y ahora están centrados en otras cosas. Yo no vivo solo de vender pájaros, pero alrededor de ellos hay mucha vida", asegura de la Hoz.

En todos los negocios consultados han constatado un descenso de las ventas por lo que ya ha trascendido de la ley. En Alcoy, Alicia Martín, responsable de la tienda de mascotas Deconatura, señala que estas navidades ya ha sufrido pérdidas importantes porque muchos clientes "pesaban que la ley ya estaba en marcha". "A mi todos los días me ha sonado el teléfono con personas preguntando si pueden tener aún conejos o hámsteres", asegura Martín.

Un conejo en un carrito durante la festividad de San Antón

Un conejo en un carrito durante la festividad de San Antón / JUAN CARLOS CARDENAS

Además, los comerciantes rechazan la idea de que comercializar con animales en una tienda provoque una merma en su bienestar. José Juan Zambrana, dueño de un establecimiento de mascotas en Elche, asegura que "las personas que nos dedicamos a esto queremos que los animales estén bien, la situación que deja la ley va a ser muy extraña porque la mayoría no estamos acostumbramos a no poder tener un conejo o un periquito en casa. Son animales que han estado con nosotros toda la vida, no estamos hablando de aves protegidas ni en peligro de extinción".

"La jaula no se vende si no vendes el pájaro"

"Estamos esperando a ver qué es lo que va a pasar porque no sabemos a ciencia cierta como nos va a afectar esta situación", señala Zamabrana. En su establecimiento, Elche más que Mascotas, José Juan vende sobre todo canarios, asegura que sí que ha tenido menos ventas, lo cual también ha supuesto un descenso en la demanda de los complementos que la acompañan, como alimentación, jaula, juguetes, barritas, etc.

"La venta de un canario tampoco supone una gran facturación, es todo lo que conlleva lo que nos permite seguir en la rueda. Esos clientes a los que les vendes el canario y todo lo que este necesita luego vuelven a la tienda a comprarte lo mismo", señala Zambrana.

Un loro orejiamarillo

Un loro orejiamarillo / CRISTOBAL GARCIA

En Deconatura se respira el mismo pesimismo. "Muchos clientes se han quedado con el titular y estas navidades en vez de haber vendido 20 conejos habré vendido 5 o 6", destaca Alicia. "Esto no repercute solo en el animal, si vendo 20 conejos tengo 20 nuevos clientes que vienen aquí a comprar pienso y accesorios, ahora tengo 15 clientes menos y muchas tiendas tendrán que cerrar porque no solo de vender pienso podemos vivir", asegura Martín.

Las protectoras celebran la nueva norma

En la otra cara de la moneda se cuentan las protectoras de animales de la provincia que celebran la puesta en marcha de la norma estatal. María Pérez, de la protectora Baix Vinalopó, ha indicado que ellos están en contra de que se venda cualquier tipo de animal y de que se críen animales en jaulas solo para venderlos.

"Es una crueldad", asegura Pérez, quién además ha añadido que lo mejor para los animales es estar "un su hábitat". "Hay ciertos animales, como serpientes o arañas, que no deberían tenerse en casa. Los traen de malas maneras, en viajes muy apretados, donde los animales pasan mucho o frio o mucho calor, se estresan y muchos mueres, sobre todo los pájaros exóticos". "Hay que hacerle comprender a la gente que hay más mascotas que se pueden tener y no camaleones, serpientes o loros".

Respecto a como afecta a los responsables de las tiendas de mascotas, María Pérez ha asegurado que "la gente tiene que ganarse la vida pero habría que plantearse las cosas bien, desde luego vender seres vivos no creemos que sea lo mejor".

Protesta

Ante esta situación se ha convocado una manifestación el 5 de febrero en Madrid, a la que acudirán representantes de tiendas de mascotas. 

En la actualidad, paralizada por discrepancias entre los socios de Gobierno tras la aprobación del anteproyecto de ley el pasado verano. Sin embargo, las discrepancias se centran en si incluir o no en la protección a los perros de caza. Que la ley salga adelantes sin especificar qué animales se podrán tener y cuáles no genera debate en la calle pero no en el parlamento.

En líneas generales, la ley especifica que ese listado se llevará a cabo en base a unos criterios de seguridad ciudadana, medioambiental y de sanidad pública.

Hasta ahora, habían sido los agricultores y los cazadores los que habían mostrado su oposición a la ley de protección animal que prepara el Gobierno. No están de acuerdo con la equiparación a los animales domésticos, lo que consideran un perjuicio para su actividad.