Derecho al aborto

El PSOE propone enmendar la reforma de la ley del aborto para evitar coacciones a las mujeres

Pretende aprovechar la tramitación en el Senado para impedir por ley prácticas disuasorias de la decisión de las mujeres como las propuestas en Castilla y León

La secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, durante una rueda de prensa.

La secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, durante una rueda de prensa. / EFE

Violeta Molina Gallardo

El PSOE mueve ficha tras la sombra que se ciñó sobre el derecho al aborto en Castilla y León y propone aprovechar el trámite de la reforma de la ley del aborto en el Senado para evitar que puedan ponerse en práctica medidas destinadas a torpedear la voluntad y la decisión de las mujeres que decidan interrumpir su embarazo.

"Nos hemos quedado preocupadas con lo sucedido en Castilla y León y no queremos que vuelva a pasar", ha explicado la portavoz socialista en la Cámara Alta, Eva Granados. Por eso, su partido ha planteado al resto de grupos parlamentarios una enmienda transaccional que obligará por ley a las administraciones públicas a no interferir en la voluntad de las mujeres que quieran abortar.

"Le hemos trasladado a los grupos una propuesta de transacción para garantizar que nadie va a coaccionar a las mujeres. (...) Es un blindaje de los derechos de las mujeres frente al acoso que estamos recibiendo por parte de la derecha y la extrema derecha, esta vez en Castilla y León pero puede darse en cualquier territorio", ha advertido Granados.

La portavoz ha denunciado que se está traficando con los derechos de las mujeres "para mantenerse en el poder o dar una batalla cultural que parecía superada" en España.

La enmienda transaccional propuesta establece que "las Administraciones Públicas competentes garantizarán el libre ejercicio del derecho a la interrupción del embarazo en los términos" de la ley y "velarán por evitar que la solicitante sea destinataria de prácticas que pretendan alterar, ya sea para afianzar, revocar o para demorar, la formación de su voluntad sobre la interrupción o no de su embarazo, la comunicación de su decisión y la puesta en práctica de la misma, con la excepción de la información clínica imprescindible y pertinente".

Añade el texto socialista que "las intervenciones diagnósticas y terapéuticas asociadas con la decisión y la práctica de la interrupción del embarazo deberán basarse, en todo caso, en la evidencia científica".

Granados considera que hay que aprovechar la "oportunidad" de la tramitación de la ley en el Senado para "blindar todavía más" los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres: "No queremos que la extrema derecha ponga las manos encima de nuestros derechos", ha subrayado.

La secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, ha incidido en que intentar manipular a las mujeres que ya tienen una decisión tomada es coacción y ha asegurado que la sociedad española no olvidará fácilmente lo que se han intentado hacer en Castilla y León para "obstruir" el derecho al aborto. "Es perverso tener que obligar a las mujeres a negarse a escuchar el latido" del feto, ha señalado.

A su juicio, la Junta castellanoleonesa pretendía introducir en la cartera de servicios prácticas que los antiabortistas llevaban a cabo a las puertas de las clínicas para atosigar a las mujeres y disuadirlas de interrumpir su embarazo, algo que ya prohíbe la ley.

Fernández ha sostenido que la enmienda propuesta por el PSOE va en la dirección de "afianzar y reforzar la protección" de las mujeres que opten por la interrupción voluntaria del embarazo.

La responsable socialista de Igualdad ha instado al PP a votar a favor de la reforma del aborto para "desmarcarse de su socio", en alusión al partido de extrema derecha, y romper así con la idea de que "donde necesita a Vox para gobernar los derechos de las mujeres están en juego".

El texto de la reforma de la ley del aborto ya impide explícitamente que se dé a las mujeres que van a abortar información sobre el embarazo, salvo en el caso de que ellas lo soliciten. Elimina asimismo el plazo de reflexión de tres días y la obligatoriedad de recibir información en un sobre acerca de los recursos y las ayudas disponibles en caso de continuar con el embarazo, "debiendo proporcionarse dicha información sólo si la mujer lo requiere" y nunca como requisito para acceder a la prestación.

El PSOE se muestra confiado de recibir los apoyos precisos para que su modificación salga adelante.

Está previsto que el Senado apruebe la reforma de la ley orgánica de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo el 8 de febrero.

La portavoz socialista ha adelantado que previsiblemente el texto será modificado con algunas de las más de 180 enmiendas presentadas en la Cámara Alta, por lo que tendrá que volver al Congreso de los Diputados para su aprobación definitiva.